Ajo negro :Sobre el origen del ajo negro se han dicho muchas cosas. Una versión muy extendida es que se descubrió casi por accidente, cuando un investigador japonés, mientras buscaba la manera de hacer más digestivo el ajo, dio con el secreto. Exponiendo el ajo a humo de madera, se dio cuenta de que al cabo de un mes no solo pierde casi todo su olor original, sino que aumentan sus propiedades.

También se dice que la técnica existía como método de conservación tradicional en Asia y que su recuperación ha permitido redescubrir tanto su buen sabor como su sorprendente poder antioxidante, mayor que el del ajo blanco.

Lo cierto es que la patente comercial es muy reciente –del 2004 en Japón– y que desde hace unos años ha ganado una gran popularidad en todo el mundo. Hoy se elabora ya en varias partes del mundo en zonas tradicionalmente productoras de ajo.

El ajo negro posee la ventaja, además, de que no deja mal aliento, no repite ni provoca molestias digestivas.

Ajo negro: Diferencias entre el ajo negro y el ajo normal

Por su forma y su color podría parecer similar al ajo blanco común pero basta con abrirlo para descubrir que las diferencias son claras: en textura, en color, en aroma, en sabor y, como veremos, también en cuanto a sus valores nutricionales.

Como hemos dicho, el ajo negro es una variedad del ajo tradicional, por lo que comparten muchas de sus características y se mantienen intactas todas sus propiedades. Tomando la cabeza entera, pueden parecer similares por fuera puesto que la forma es la misma y ambas se recubren de una fina piel blanquecina y compuesta por diferentes capas muy finas, delicadas y quebradizas. Cuando lo cortas por la mitad es cuando surge la magia de la joya negra.

La más evidente es el color, como su propio nombre indica, aunque este no se adquiere de repente, sino que se va oscureciendo conforme pasan los días. A las 72 horas de comenzar la maduración, los dientes comienzan a volverse amarillentos y pasados 10 días van adquiriendo un tono marrón. A los 20 días del proceso es cuando los dientes se vuelven de un color negro intenso y, cumplido el mes, el ajo está ya muy maduro, sus dientes están totalmente negros, más blandos, con un sabor más dulce y su piel se vuelve más amarillenta.

Beneficios del ajo negro

Además de prevenir enfermedades y actuar como antibiótico natural el ajo negro tiene los siguientes beneficios sobre la salud:

Antioxidante

El ajo negro es antioxidante porque es muy rico en vitamina C y contiene entre 5-7 veces más polifenoles que el ajo blanco. La ventaja de los antioxidantes es que reducen la acción de los radicales libres, moléculas que favorecen el en envejecimiento prematuro de las células del organismo. Por lo tanto, el ajo negro retrasa el envejecimiento celular y la aparición de enfermedades degenerativas y crónicas.

Previene la aparición de las enfermedades cardiovasculares

Existen ensayos clínicos que demuestran que el ajo mejora la circulación sanguínea, reduce la tensión arterial, disminuye la agregación plaquetaria y ayuda a controlar los niveles de colesterol sanguíneos. Estos beneficios están relacionados con su aporte de alicina y de ajoenos.

Ajo negro: Previene la migraña

Las sustancias vasodilatadoras que contiene el ajo negro también pueden influir y ayudar a reducir los dolores de cabeza y las migrañas.

Si la sangre no puede circular la sangre por las arterias se produce un aumento de la presión arterial. En determinados casos, las causas de los dolores de cabeza son esa presión, por lo que conseguimos mejorar toda la circulación, las migrañas van a mejorar o se van a reducir su intensidad

Actividad antimicrobiana

Algunos estudios han demostrado que la mezcla de sus componentes (en especial alicina, ajoenos y trisulfuro de dialilo) actúan frente a bacterias responsables de algunas infecciones y también incluso contra algunos tipos de hongos como la cándida.

Mejora las defensas

El ajo potencia el sistema inmunitario, en concreto, aumenta la proliferación de linfocitos (un tipo de glóbulos blancos que luchan contra las infecciones) y del interferón gamma.

Prevención contra algunos tipos de cáncer

Los estudios se han realizado principalmente con animales, parece que la compleja y completa composición del ajo modula la actividad de ciertas enzimas oxidativas y repara el ADN previniendo el daño cromosómico, por lo que podría prevenir algunos tipos de cánceres como el de colon, mama o el gástrico”.

Aunque el ajo negro tiene muchos beneficios,las personas intolerantes al ajo blanco también lo son al negro, y que debe evitarse su consumo en aquellas personas que tengan problemas de coagulación o que vayan a pasar por quirófano. Además, puede interaccionar con determinados medicamentos, fundamentalmente anticoagulantes, como la heparina o la warfarina porque aumenta la acción de estos fármacos y puede favorecer la aparición de hemorragias..

En el caso de preparados a base de ajo blanco o negro, es decir, productos de fitoterapia con concentrado de ajo o de sus componentes, tampoco están indicados en mujeres embarazadas o en lactancia ya que se le atribuyen efectos abortivos, desórdenes del ciclo menstrual y alteración del sabor y el olor de la leche materna, por lo que los lactantes la podrían llegar a rechazarla. Pero sí pueden consumir ajo blanco o negro en cantidades moderadas en preparaciones culinarias.

ALFA