Roncar es una condición que no solo afecta a quien la padece teniendo un sueño poco reparador, además de poner en peligro su vida; sino también a quienes están cerca de la persona afectada, pues puede generar dificultades para conciliar el sueño e inclusive producir insomnio.
Nada más molestoso que despertar en medio de la noche por este sonido. Sin embargo, roncar es visto en la mayoría de los casos como una condición sin importancia; aunque está clínicamente identificado como el Síndrome de Apnea-hipoapnea.
Según estudios realizados afecta a casi el cuatro por ciento de la población adulta, en mayor proporción a los hombres y produce una interrupción del paso del aire hacia los pulmones mediante la reducción del aire (hipopnea) o detención completa (apnea); produciendo una disminución de los niveles de oxígeno en la sangre y aumento de anhídrido carbónico, resultando un estado inadecuado para el funcionamiento normal del organismo.
La interrupción del paso del aire se puede producir varias veces por hora. A partir de 10 veces por hora es considerado un cuadro de apnea; entre 20 y 30, es estimado moderado; y más de 30 veces se cataloga grave o severo. Roncar tiene consecuencias limitando la vida de la persona; afecta la salud física, sus procesos mentales, desempeño laboral y relación familiar.
También, entre las consecuencias están la sensación de no descanso que se expresa en somnolencia, dificultad para memorizar; así como jaquecas e irritabilidad. Por eso, es mejor tomar armas en el asunto para solucionar la situación.
Se debe comenzar por una revisión médica, ya que entre las causas orgánicas de roncar está una débil musculatura en la base de la lengua y la garganta de su pareja; igualmente puede presentarse por un excesivo grosor de la mucosa en la garganta, una úvula (campanilla) alongada y amígdalas pronunciada. En mano de expertos, es necesario que se identifique sí el ronquido es por la inflamación del aparato respiratorio por estados gripales o alérgicos, que impiden el paso del aire a través de la nariz, estrechez de los cornetes nasales o sinusitis crónica.
Asimismo, roncar puede ser consecuencia de situaciones sicosociales tales como estrés, inadecuada postura al dormir o del colchón, tabaquismo, alcoholismo y el exceso de peso. ¿Qué hacer para ayudar a superar esta situación? Hará mucho ayudando a su pareja a relajarse. Anímelo a mejorar las condiciones físicas a través del ejercicio, que además de mejorar los niveles de estrés, ayuda a reducir el peso; controlando su exceso y manteniéndolo en niveles estables.
Otras recomendaciones relacionadas con la actividad social, serían el control en el consumo de alcohol, no fumar, y progresivamente mejorar el consumo de los alimentos con una proporción mayor de frutas y vegetales. Roncar es un tema serio, puede producir cuadros de hipertensión e incluso, puede afectar el corazón; y más grave aún, puede causar la muerte ante la imposibilidad de respiración por las condiciones físicas que genera. Por ello, superarlo es un gran paso para vivir de manera saludable.
ALFA