De las muchas cosas curiosas que puede conocer, están los baños termales en el mundo, no se consiguen en todas partes pero los lugares donde existen, los han preparado como zonas turísticas para su recreación y descanso, casi como un culto al reposo, la relajación, la tranquilidad, que puede ser visitado para su disfrute total y el valor añadido de que sus aguas contienen múltiples minerales, con el lodo puede cubrir todo su cuerpo para luego retirarlo con baños alternos de agua fría y tibia sintiendo rápidamente los efectos favorables en su piel.
En Islandia está el spa Blue Lagoon, las aguas y vapor forman parte de un sedimento de lava que calienta una gran piscina con el agua de una planta de energía geotérmica, esta agua sobrecalentada se utiliza para ejecutar las turbinas que generan electricidad; los huéspedes se bañan disfrutando de minerales como el sílice y azufre. La temperatura del agua oscila entre 40°C o 104°F.
Las más grandes de Estados Unidos y terceras en el mundo, están en el Parque Nacional Yellowstone, miden aproximadamente 75 por 91 metros y tienen una profundidad de 49 metros, con una descarga aproximada de 2.000 litros por minuto; en primavera el colorido varía del verde al rojo brillante y naranja, es el resultado de algas y bacterias pigmentadas por el agua rica en minerales, el centro de la piscina es estéril por el calor extremo; ahí está la fuente más grande conocida de carbonato del mundo.
Blood Pond Hot es uno de los “infiernos” de Beppu, Japón, hay 9 increíbles aguas termales más para ver que para bañarse; el llamado “infierno de sangre” es un estanque de agua caliente, rojo por el hierro en las aguas, es el más fotogénico de todos.
Las aguas termales Las Trincheras ubicadas en Venezuela, son consideradas las segundas mejores del mundo por su composición mineral y altas temperaturas, beneficiosas para combatir el stress, el relajamiento muscular, rejuvenecimiento celular, oxigenación de la sangre; emanan del interior de la montaña a 92º centígrados, acompañados de denso vapor que se desprende de ellas; su composición físico-química las clasifica como mixtas, alcalinas, silíceas, hipertermales, bicarbonatadas, fluoradas, sódicas, y radioactivas no nocivas, por el origen geológico producen lodo natural y algas minero-medicinales.
Glenwood Springs, en Colorado, EE.UU., tiene la piscina natural de aguas termales más grandes del mundo, con un caudal de 143 litros por segundo, puede bañarse en la piscina terapéutica a 40°C, o nadar en la gran piscina a 36°C.
A través del tiempo se movilizan cada año cientos de miles de personas hacia estos refugios donde algunas personas por diversión, curiosidad, enfermedad o simplemente para reducir la tensión que nos produce el trabajo y la rutina diaria, disfrutan de un fin de semana de esparcimiento como no lo conseguiría en ningún otro sitio, alimentando su espíritu y además beneficiando a su organismo, si lo desea puede complementar con unos deliciosos masajes practicados por manos expertas y capaces que siempre ofrecen en estos lugares de ensueño.
ALFA