Si tiene oportunidad, celebre las fiestas mágicas que tienen un carácter pagano y que por supuesto, tienen una propiedad cabalística y esotérica, unas se han convertido en supersticiones y también usan hechizos mágicos, pócimas y filtros; la mayoría de los pueblos paganos ajustan su calendario y así también circunscriben los ritos y tradiciones a las cuatro grandes estaciones, se debe establecer una relación entre ellas y los elementos de Tierra, Fuego, Agua y Aire.

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Los druidas implantaron en su almanaque una relación entre el sol, la luna y las estrellas, que habla del profundo sentimiento de la magia asociada a lo sagrado, es un calendario lunar de 13 meses, de 28 días cada uno con un día interpuesto fuera de cuentas, atribuyeron a cada mes un factor vegetal relacionado con la Magia de los Druidas, empezando con el abedul y terminando con el muérdago; sus conocimientos astrológicos se reflejaron en el calendario de Coligny.

Las celebraciones principales, dedicadas al elemento Fuego, fueron llamadas  Samhain, Imbolc, Beltane y Lughnasadh, que están al comienzo de  Noviembre, Febrero, Mayo y Agosto.

Samhain es el ciclo agrícola y ganadero, época para almacenar la cosecha, recoger el ganado y llevarlo a los establos, limpiar la casa, llevar ofrendas a los antepasados, era la más imponente porque también representa la celebración del fin del mundo y el nacimiento del año nuevo, la relación entre el mundo de los vivos y los muertos; antiguamente esta celebración duraba tres días y se creía que las predicciones de futuro que se hacían podían ser más acertadas, puede relacionarse con el día de los muertos.

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Imbolc es el festival que se celebra el primer y segundo día de Febrero, iniciando el tiempo de la purificación y renovación, también recibe el nombre de Brigantia, por Bridhe, diosa del fuego durante Imbolc, la diosa se transforma, de una vieja bruja vestida de negro, en una novia virginal ataviada de blanco; pasando de la muerte a una nueva vida; Imbolc era la fiesta que trataba de despertar el sol de invierno para favorecer la fertilidad y la purificación.

Beltane se celebraba el primero de Mayo, es otra fiesta asociada a la fertilidad  bajo la protección del dios Belenos, dios del fuego que influía sobre la fertilidad de los animales y de la tierra, lo importante de estas fiestas eran las fogatas para cuidar a los animales de enfermedades y por eso, se les hacía atravesar las llamas como poderosa protección contra las hechicerías y enfermedades que acecharan  hombres y rebaños, era una fiesta de acercamiento entre el mundo de los espíritus malignos y los vivos; eran propios de estas fechas los ritos relacionados con los árboles y así han llegado hasta hoy.

En verano se celebraba la fiesta más importante del ciclo, la de Lugnasad o Lughnasadh, era la festividad de la luz, la fiesta agraria por excelencia, donde se agradecía por la fertilidad de los animales y la abundancia de la cosecha que eran las reservas para el invierno.

ALFA