A través de los llamados “Controles Parentales”, hoy en día es posible que como madres podamos evitar que nuestros hijos estén expuestos a contenidos inapropiados, y de cualquier índole, a través del universo del Internet. De tal manera que si bien, las posibilidades de aprender a través de la web son ilimitadas, tampoco es menos cierto que de la misma forma, en cantidad y diversidad, son los focos de “contaminación mental” que pueden sufrir sus pequeños. Así que si como madre responsable le preocupa qué ven y escuchan sus hijos, este artículo es para usted.
Los niños de hoy en día parece que ya nacen con un “chip” que les brindan habilidades extraordinarias para “devorar” cualquier conocimiento relacionado con la tecnología. No necesitan un curso, y a veces, ni mayores explicaciones para aprender a utilizar los “smartphones” de última generación. Nos damos cuenta que con solo una mirada, aprenden a utilizar la PC o “laptop”, “tablet” o cualquier otro de estos objetos, y los vemos navegando como “peces en el agua” por páginas que quizás ni nosotros mismos habíamos visto jamás.
Así son los niños de hoy. ¿Pero cómo somos sus madres? ¿Hemos procurado avanzar junto con ellos o por el contrario, hasta los llamamos para pedirles ayuda y orientación acerca de cómo encender la computadora de nuestra propia casa o cómo copiar y pegar un mensaje desde nuestro móvil? Si usted es del segundo tipo de madres, creo que está en problemas, por lo que aunque quizás no nos identifiquemos con esta área del conocimiento, le invito a acercarse a ella. No muerde y creo que cualquier esfuerzo vale la pena si se trata de la seguridad de nuestros hijos.
Pero quizás no sabemos ni de qué debemos cuidarlos. Pues aunque no lo crea, a través de Internet los niños pueden entrar en contacto con el duro mundo de la pornografía, incluso la infantil. Tienen acceso a fotografías y videos de todo tipo, no solo con contenido sexual, sino relacionados con actos de violencia extrema. Pueden ser víctimas de los llamados ciberdepredadores, que pueden atacarlos logrando ganar primero su confianza para luego abusar de ellos, física o psicológicamente, fenómeno que se conoce como “grooming”. Pero más importante que eso es saber: ¿qué puede usted hacer?, síganos.
Existen aplicaciones que pueden ser descargadas en PC o “smartphones” que impiden el acceso de nuestros hijos a páginas con contenido sexual o violento, a través de un sencillo bloqueo, inclusive aplicable a televisores. Asimismo, controlan mensajes de texto y llamadas que consideremos inapropiadas o desconocidas; y también son capaces de limitar el tiempo que nuestros hijos le dedican a la navegación en Internet a páginas de juego u otras aplicaciones.
Por último, pero no menos importante, y para lo cual no necesita ser una experta en tecnología, siempre mantenga los canales de comunicación abiertos con sus hijos. Llénelos de amor y confianza, eso le garantizará más el éxito que cualquier dispositivo, ¡se lo aseguro!
ALFA