Lunes, 7 de diciembre de 2015. En Japón fue creado un robot que piensa, escribe e incluso ejerce labores periodísticas en un diario de ese país. Este robot-reportero forma parte del “staff” de escritores de un conocido medio de comunicación y afortunadamente, al menos para él, carece de sentimientos; pues no ha sido bien recibido por sus compañeros humanos, quienes lo ven como una competencia digna de todo su rechazo.

Y es que pareciera que la tecnología poco a poco está logrando desplazar a los seres humanos, generando importantes controversias, hasta el punto que podamos, en un futuro no muy lejano; ser dirigidos por cabezas pensantes, sin cerebro, pero sí con muchos cables y transistores.

El mencionado robot-reportero fue puesto a prueba antes de ser contratado por el periódico y su nombre es Kiaibi Xiaoxi. Escribió artículos relacionados con el área de deporte y negocios, en perfecto idioma mandarín e inglés; lo cual lo ubica inclusive en un rango superior a muchos de sus compañeros que solo dominan su idioma materno.

Pero no es el único, pues otro diario de gran circulación en ese país, llegó a publicar artículos relacionados con temas económicos; cuya fuente se obtuvo de información procesada por un ordenador. Esto fue duramente criticado por analistas y estudiosos de ese país, debido a su falta de confiabilidad; así como lo ha sido Kiabi Xiaoxi, quien es visto con recelo e incluso desprecio por reconocidos periodistas japoneses y chinos, acusándolo de pretender usurpar puestos de trabajo que pudieran ser ocupados por profesionales humanos.

Este dilema acerca de la confiabilidad en manos y mentes robóticas de tareas y labores en diferentes áreas en los puestos de trabajo, promovió un estudio por parte de un reconocido centro de análisis de Japón y la Universidad de Oxford, el cual arrojó que efectivamente lo que se vislumbra no es nada alentador para los humanos de carne y hueso.

El estudio permitió determinar que más de la mitad de las actividades laborales que se realizan actualmente en Japón, pudieran ser realizadas con toda comodidad por robots, que no se enferman, no tienen problemas, no cobran y tampoco mueren.

Sin embargo, aclararon que tampoco es posible hacerlo en todas las tareas. Aquellas que requieren dominar aspectos como la creatividad, persuasión, negociación e inclusive las relacionadas con las artes; no consideran que puedan ser desempeñadas por robots.

No obstante, el tema no deja de preocupar a muchos; pues si bien Japón se caracteriza por ser un país cuyo crecimiento demográfico es sumamente lento. En otras culturas y regiones del mundo, inclusive en las más deprimidas económicamente, los jóvenes aspiran desarrollarse profesionalmente. Un deseo que en nada pudiera combinarse con esta teoría robótica.

La tecnología tiene un valor importante en las sociedades, siendo positiva en muchísimos casos; pero también peligrosa, sobre todo si dejamos de lado lo que se piensa (razón) y se siente (corazón); dos aspectos que definitivamente los robots, no tienen.

ALFA