Para cuidar la piel según la edad, es necesario seguir unos pasos que son  importantísimos, entre ellos está la limpieza, la humectación e hidratación y por supuesto ser muy cuidadosa en lo que respecta a la protección solar; un factor indispensable sobre todo en la salud de su rostro. Todo esto, combinado con los productos de uso diario que usted utiliza, y que le ayudan a mantener su piel en buen estado; por eso, le ofrecemos, unos sencillos consejos para que pueda elegir el tratamiento adecuado.

Cuidar la piel entre 20 y 29 años: en esta etapa es totalmente indispensable, los tratamientos de belleza básicos: una rutina de limpieza elemental; ya que se mantiene la humedad y humectación natural casi intacta, en estos años se suele luchar contra las espinillas y el acné; precisamente por el exceso de grasa. Es un tiempo para prevenir futuras complicaciones en el rostro; esto marcará positiva o negativamente el estado de su piel a futuro.  

Precisamente por eso, se requiere de mucha atención, colocando una crema suave para hidratarla y limpiarla cuantas veces sea preciso, tomando en cuenta que a los 25 años deberá usar cosméticos para la noche y para el área alrededor de los ojos. También es preciso no olvidar desmaquillarse religiosamente en las noches.  

De los 30 a 39 años: debe abocarse en combatir los primeros signos de envejecimiento, que aun siendo leves, se pueden notar mucho más en ciertas mujeres, dependiendo de su genética. Es mejor prevenir a tiempo para mostrar más tarde una piel envidiable y para eso, empiece usando cremas y lociones con ingredientes más concentrados y productos anti-edad, especialmente formulados para ese período.

De los 40 a 49 años: a esa edad precisamente comenzamos a experimentar los cambios normales provenientes de la menopausia. Las manchas y resequedad caracterizan estos años; la piel no se recupera fácilmente, las células mueren más rápido, por este motivo es esencial recuperar la humedad, con sueros hidratantes, cremas anti-edad mucho más potentes que entren en las capas más profundas de su piel; igualmente es recomendable usar un tratamiento reconstituyente para devolver elasticidad, firmeza y humedad al cutis, ayudando a atenuar líneas arrugas, estimulando las células para producir colágeno.  

De 50 años en adelante: la resequedad es extrema, la piel es muy débil y frágil,  el rostro puede cambiar su forma por la flacidez muscular; entonces lo primordial es reafirmar. Tendrá que armarse de perseverancia, para ganarle la batalla a la edad; lo primero que debe hacer es tomar suficiente agua y usar tratamientos alternativos con plasma, ácido hialurónico, colágeno o si lo prefiere y está al alcance de sus posibilidades, recurrir al bisturí, siempre y cuando se encuentre en perfecto estado de salud y lo recomiende un especialista.

Toda mujer es bella, por eso vale la pena vivir cada edad, llena de vitalidad, mostrando un rostro radiante y hermoso; pero para lograrlo, es indispensable poner toda nuestra voluntad, cuidándonos con esmero.  

ALFA