La digitopuntura, siendo un término acuñado en Occidente, evoca la idea de punzada o punción estrechamente relacionada con la acupuntura. Tanto este término como el de acupresión, son comúnmente aceptados para definir el masaje de ciertos puntos con dedos y pulgares que se aplica, según los principios de la acupuntura y, que hoy día son reconocidos como grandes beneficios para el cuerpo.

El masaje y el tacto mejoran la salud y alivian el dolor, esto es algo sabido desde hace miles de años. Se dice que esta técnica de masaje por presión de dedos nació en la India y fue extendida a china, Egipto y Asia por los monjes budistas, siendo usada como técnica curativa.

La medicina tradicional china habla de meridianos, canales o puntos de energía principales y cada uno de ellos está relacionado con un órgano vital; a través de estos meridianos circula la energía que nos mantiene vivos; cuando se bloquean o se intoxican se produce un desequilibrio en nuestros campos energéticos que se traduce en síntomas y enfermedades diversas. Cuando se aplica la digitopuntura sobre los nodos o puntos energéticos, se reactiva la circulación y equilibrio eficazmente, previniendo las enfermedades y ayudando al tratamiento de ellas.

Por tanto, a través de la dígitopuntura, el individuo mantiene su organismo en un mejor estado de salud y vitalidad, reforzando sus órganos internos y conservando su tono energético.

Muchos son los artículos que aseguran que la digitopuntura deriva de la acupuntura; sin embargo, Carola Beresford-Cooke, en su libro “Digitopuntura”, habla de las primeras agujas de acupuntura aparecidas hace 6.000 años en unas tumbas; dichas agujas eran de piedra, esto significa que no podían penetrar mucho los tejidos del cuerpo, de tal manera que solo podían ser utilizadas para presionar y frotar. Esto implicaría que se hizo primero digitopuntura y más tarde se perfeccionó hacia la acupuntura.

Pero, realmente lo importante es el beneficio que produce ante cualquier bloqueo o dolencia. Además, se le puede aplicar a cualquier persona de edad y estado, ya que no hay contraindicaciones. Por tanto, los frutos de esta técnica pueden ser variados y utilizados para: Dolores musculares, contracturas, dolor del cuerpo en general; estados de agotamiento, cansancio crónico ya que ayuda a que el flujo de “kí” fluya y le permita sentirse mejor; estrés, exceso de pensamientos, no poder parar.

La digitopuntura puede ser muy relajante; le puede ayudar en casos de depresión, ansiedad, desajustes menstruales, embarazo, para el cansancio y dolor muscular si lo hay; posparto, ayuda mucho en la recuperación tras el parto; menopausia, para reducir sofocos; estreñimiento o simplemente por el placer de recibir un tratamiento que mantenga la energía vital en funcionamiento y equilibrio.

Ahora bien, tenga en cuenta que la digitopuntura es un complemento y no un sustitutivo de la asistencia médica, ya que lo que puede parecer una molestia cotidiana puede ser algo más grave que requiera de tratamiento profesional; Así, que si su médico se lo indica puede ser usada al mismo tiempo con su medicación ortodoxa.

ALFA