Hablar del estilo egipcio, es sumergirse en la historia de la humanidad, en un mundo mágico que ha marcado pautas a seguir a través de los siglos. Es recordar a personajes de películas famosas como Cleopatra, protagonizada por la afamada Elizabeth Taylor, esa actriz que impactó al mundo con su color de ojos único y ese estilo sensual y elegante, que ha sido imitado por miles de mujeres en todo el mundo.
Egipto con sus costumbres, estilos de vida, indumentarias, joyería, historia y cultura, ha sido motivo de inspiración para infinidad de arqueólogos, arquitectos, cineastas, diseñadores y profesionales de distintas áreas, ya que ha sido un pueblo amante de la naturaleza y del aire libre, del estilismo y del arte, sumamente rico en expresión plástica, lo que ha dado a esta civilización una personalidad fuerte y coherente en su forma de pensar y actuar, y que se caracteriza por su cortesía, amabilidad, de sentido de reverencia y sobre todo por el talento que poseen en diversas disciplinas, dentro de las cuales se encuentra la moda en su sitial importante.
Por esta razón, el conocimiento del contexto histórico egipcio en el mundo de la moda, es básico para lograr el diseño y desarrollo de nuevas ideas, considerando que todo diseñador debe poseer conocimientos amplios sobre la historia, porque de lo contrario no podría llamarse un diseñador en todo el sentido de la palabra.
Es así como, Egipto representa a una de las civilizaciones que más aportes hace a las colecciones de moda, con su gran cantidad de detalles que han nutrido los diseños creativos durante el siglo XX y obviamente sigue haciéndolo en el siglo XXI, debido a que alcanzó a lo largo de su historia un nivel suficientemente alto para hacer aportes significativos a la evolución de su indumentaria peculiar, su joyería, maquillajes y peinados, que hoy día siguen siendo referencia para los diseñadores de todo el mundo.
En este sentido, para conocer la historia de la indumentaria del antiguo Egipto y su influencia en el mundo de la moda actual, se debe comprender que la importancia que ha tenido el lino para los egipcios, ya que durante tres milenios casi todas sus ropas eran confeccionadas en esta tela, la cual se fabricaba utilizando la planta que se cultivaba en el río Nilo, debido a que se trata de un tejido muy suave y manejable que permite crear prendas exquisitas y variadas.
Cabe destacar que, la principal característica por la cual los egipcios la utilizaban era su frescura, considerando que en Egipto hace mucho calor y esta tela los ayudaba a confeccionar prendas en cortes sencillos para soportar las condiciones climáticas. Así, mientras los hombres vestían una pieza que les envolvía las caderas y colgaba formando pliegues por adelante, al cual llamaron squenti, las mujeres portaban el calasiris, que una especie de vestido en corte tubo, que se acompañaba algunas veces con mangas desmontables.
Pero los diseñadores de la época moderna, no sólo han tomado en consideración las telas, sino también los colores, los estilos y cortes sencillos de sus prendas, los detalles, bordados, accesorios, etcétera, que han hecho que la vestimenta y estilo egipcio haya sido y es referencia de muchas casas de diseño famosas, así como también de nuevos diseñadores que han emergido en el mágico mundo de la moda.
Por estas razones, se ha logrado mantener esa admiración, respeto y fascinación por esta gran y poderosa cultura, motivo de inspiración no sólo para diseñadores sino para millones de mujeres que alrededor del mundo visten y se maquillan tomando como referencia el estilo egipcio, y que los diseñadores aprovechan para orientarse durante el proceso creativo de sus prendas y joyas, utilizando como referencia aspectos básicos, tales como: vestidos vaporosos, las muselinas, los tejidos dorados, capas, túnicas, las piedras preciosas, entre otros.
Sin duda estamos en presencia de un estilo fresco y que fundamenta la mayoría de sus prendas en cortes amplios y rectos, donde la silueta era el resultado de dos factores claves: la finura y el acabado del lino, que los diseñadores explotan al máximo en creaciones donde resaltan el arrugado o el plisado natural con nítidos pliegues marcados, que refuerzan con el uso de collares y cinturones decorativos en diversos colores y texturas, los cuales eran típicos de esta cultura.
En cuanto a la joyería, era una costumbre muy arraigada la utilización de joyas por parte de los hombres y mujeres de la alta sociedad egipcia, las cuales se caracterizaban por ser muy coloridas, y diseñadas en oro procedente de Nubia, la actual Etiopía, con motivos naturales, tales como: frutos de mandrágora amarillos, hojas de palmera verde, flores de loto blancas.
Además se utilizaban muchas piedras semipreciosas, especialmente el lapislázuli procedente de Afganistán, amatista, turquesa, cuarzo, cornalina, jaspe rojo y verde, así como vidrio y pasta vítria que se utilizaba para imitar piedras preciosas, o la esteotita, que es una piedra blanda que se tallaba para elaborar prendas pequeñas, tales como collares, pulseras y prendedores.
Toda esta serie de detalles tanto de la vestimenta, como de la joyería, maquillaje, peinados y demás accesorios, han sido frecuentemente utilizados por los grandes diseñadores a la hora de realizar sus colecciones que posteriormente llevan a las grandes pasarelas del mundo.
En este contexto, tenemos como uno de los principales exponentes de la moda egipcia, a la casa Christian Dior, la cual se lució presentando su colección de primavera del año 2004, la cual tuvo como principal responsable a John Galliano, quien era el director creativo de la casa Dior, y decidió inspirarse en la cultura egipcia para presentar en pleno corazón de París un fabuloso desfile en una de las pasarelas más famosas del mundo, donde unió a dioses, momias y esfinges, que lograron una combinación perfecta para impactar al mundo de la moda de tal manera que hoy día aún se recuerdan los detalles de dicha colección.
Es así como Galliano, llevó a las pasarelas francesas el glamour y el espléndido lujo de sus tumbas faraónicas, que evocaban al famoso personaje egipcio “Tutankamón” que vivió en el siglo XIV antes de Cristo, además de la gran belleza de sus diosas legendarias y figuras femeninas como Cleopatra que ha sido uno de los iconos femeninos más reconocidos de la historia, envueltas en tonos dorados que emulan sus oros, así como los plisados, sus maquillajes llamativos y la frescura de sus turquesas y corales.
De esta manera, la Casa Dior con la dirección de Galliano, aprovechó el uso de volúmenes invertidos que logra aumentar el torso de un modelo, mientras minimiza la parte inferior de la figura, o viceversa, reforzándolos con envolventes cintas que lograron un efecto fresco, típico del estilo egipcio, trasladado al siglo XXI, donde las luces de Paris se combinaron con las túnicas egipcias para lograr que la colección de primavera-verano de 2004 de Galliano causará un alto impacto.
Este impacto fue demostrado a través de múltiples comentarios positivos de famosos como Hillary Alexander, quien calificó al desfile como una vuelta a la vida, añadiendo que desde que Elizabeth Taylor encarnó a la mítica Cleopatra, no se había vivido tanto derroche, lujo y exceso; mientras Sarah Mower, representante del portal de moda style.com, resaltó la majestuosidad y lujo de la colección y catalogó el evento como un derroche de elegancia y buen gusto.
Asimismo, Sarah Jessica Parker, quien se encontraba en París en esos días, grabando unos capítulos de la famosa serie televisiva “Sexo en Nueva York”, asistió al desfile y manifestó lo siguiente: “sabía que John Galliano era capaz de construir elegancia, fantasía e historia, pero esto va más allá de lo fantástico; más allá de lo creíble. No he visto en mi vida nada como esto».
Otro de las casas de moda famosa es Givenchy, la cual también se ha caracterizado por realizar pasarelas fabulosas, lo cual la ha posicionado como una de las preferidas de la semana de la moda realizada en Paris, lo cual ha sabido aprovechar muy bien el diseñador Riccardo Tisci, representante de esta casa de modas, quien realizó una colección Otoño-Invierno 2016/2017, donde apostó por estampados arriesgados con mezclas atrevidas, que se reforzaron con detalles, maquillaje y accesorios inspirados en la moda egipcia, que lucieron modelos famosas como Mariacarla Bosconou y Candice Swanepoel, modelo de Victoria’s Secret.
El desfile llamó mucho la atención y tuvo un impacto muy positivo, debido a la utilización de prendas llamativas elaboradas especialmente en estampados abstractos y étnicos de inspiración egipcia, así como también por varias versiones de prints de serpiente que dieron a la pasarela un toque especial y mágico que gustó a la mayoría de los asistentes, generando muchos comentarios positivos.
Para finalizar, es importante destacar el trabajo del diseñador libanés Elie Saab, que según la Revista Digital Vogue (2017) “manifiesta su arte con el diseño de exquisitos vestidos que son una oda a la herencia egipcia, una muestra de los años dorados del mundo árabe donde”, y agrega palabras del diseñador donde expresa que “la gente era libre de expresarse y a sus talentos creativos en teatro, arte, periodismo, música y cine, transformando a Egipto en una meca del progreso y permitiendo a la cultura árabe florecer”.
Elie Saab confecciona sus diseños combinando brocados, bordados y encajes, los cuales están minuciosamente trabajados, utilizando motivos impresionantes como árboles, ríos y nubes que al momento de que las modelos los lucen en las pasarelas, pareciera que estas beldades flotaran en medio de las luces y el colorido de las mismas.
De esta manera, este diseñador libanés logra efectos realmente impactantes a través del juego con el dorado, los tonos arena y los acentos en azul rey, con motivos egipcios, como los utilizados en un vestido que muestra a la ciudad de Domyat con una serie de botes sobre el río Nilo, el cual requirió de tres semanas de trabajo, con 140 horas dedicadas solamente al bordado, utilizándose unas 5.000 lentejuelas y unos 10.000 cristales ensamblados a mano, los cuales estaban sobre un tul de seda, que lograron dar vida a la ciudad Egipcia sobre la pasarela.
ALFA