Popularmente, se conoce que el periodo de gestación es el tiempo durante el cual el feto forma su cuerpo. Sin embargo, a su vez, es la etapa donde desarrolla todos sus sentidos y se muestra afectado por las emociones que lo rodean. Los estímulos prenatales son aquellos impulsos que ayudan al bebé a agudizar sus elementos sensitivos mediante la utilización de técnicas específicas. La realización de estos ejercicios es vital para el completo crecimiento del niño.

En el útero está creciendo un niño que todavía no podemos ver, pero que no se muestra aislado del mundo exterior. Por el contrario, intenta relacionarse de diversas maneras utilizando sus sentidos. Éstos, a partir del segundo trimestre, ya se encuentran receptivos a lo que sucede fuera de la cavidad materna; su tacto, su oído, la vista e incluso el gusto están alertas, generando impulsos eléctricos en su organismo.

Además de esto, las alteraciones emocionales son captadas con facilidad, sobre todo las de la madre. Estados depresivos, de extrema felicidad, estrés, amor y calma son percibidos por esta criatura en formación.

Los resultados de las interacciones sensoriales y la absorción de emociones son registros que se almacenan directamente en las neuronas. Estas pasan por un proceso de autodestrucción natural, sin embargo, esta acción interna se puede reducir. Para las células nerviosas es importante la ilación con las demás, de lo contrario, entra en modo de desolación. Cuando en el bebé se estimulan los sentidos y las emociones, se generan reacciones eléctricas que contribuyen a la completa unión del sistema nervioso, logrando disminuir su devastación.

Es conveniente fomentar todas las sensaciones del niño, de esta manera se pueden llevar sus habilidades a un nivel superior. Para esto, existen métodos sencillos de profundización sensitiva. Los más utilizados promueven la actividad visual y auditiva.

En el primer caso, se puede usar linterna con luz suave. Hacer con ella repetidos acercamientos al abdomen mientras está encendida, hará que el pequeño busque observarla. También, exponer la barriga a la luz de los primeros rayos solares tiene efectos estimulantes, aunado a esto, proporciona nutrientes y vitaminas.

No obstante, el segundo sentido mencionado, es uno de los que se forma más rápido, por ello, desde temprano se debe interactuar con este. La percepción del sonido es fundamental. Hablar con el pequeño, aunque parezca insólito, es muy efectivo; leerle un cuento, hacerle preguntas y trasmitirle pensamientos positivos, no solo tendrá un buen efecto en sus células nerviosas, sino que, además, creará una conexión afectiva.

La participación constante de quienes engendraron a este pequeño no debe ser descuidada; este necesita que ambos padres se involucren en su formación, la cual también debe ser efectuada en un entorno agradable y sin emociones hostiles, es decir, que debe reinar la armonía.

En consecuencia, de efectuar las respectivas estimulaciones se obtendrá una mejor unión familiar: una madre con mayor preparación psicológica para el momento del parto y un bebé con un desarrollo eficiente. Por esto, no debemos abandonar la interacción prenatal.

ALFA

5 comentarios de “IMPORTANCIA DE LA ESTIMULACIÓN PRENATAL

  1. alexxa Marin dice:

    Es lindo notar como reaccionan a las motivaciones sensoriales, cada madre debería realizar esto con su hijo en crecimiento.

  2. Fabián Cabeza dice:

    Interesante. Los beneficios no son exclusivamente para el bebé, los padres también obtienen frutos de estas estimulaciones.

  3. Maira Hernández dice:

    Ambos padres deben mantener una efectiva comunicación para que puedan lograr ese ambiente armonioso que se desea para el pequeño.

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