Jueves, 04 de febrero de 2016. Los teléfonos inteligentes se han convertido en un accesorio capaz de definir el estilo y la moda de quien lo usa. Con el paso de los años, estos aparatos han ido sufriendo modificaciones tanto en el aspecto tecnológico, para hacerlos más veloces y útiles; como en su apariencia, más pequeños, más ligeros y con diseños que atienden a rigurosos parámetros estéticos.
Remontándonos un poco a la historia, la primera llamada desde un teléfono móvil se realizó desde la ciudad de Nueva York, en los Estados Unidos, el tres de abril de 1973; según lo reporta la popular enciclopedia virtual “Wikipedia”. El equipo utilizado fue un “DynaTAC 8000X”. Pesaba un kg y medía 33.02 x 4,445 x 8,89 centímetros.
Es a partir de la década de los 90, cuando se avanza tecnológicamente en los teléfonos móviles; incorporando el sistema global para las comunicaciones móviles o GSM, por sus siglas en inglés, el cual le aportaba tanto servicio de voz como de datos.
Posteriormente, en los años siguientes, la telefonía móvil fue avanzando con la tecnología 2G y las recordadas “GPRS” o “EDGE”, hasta alcanzar la 3G y 4G. Pero, ¿qué ocurre cuando se unen la belleza y la tecnología en los teléfonos móviles inteligentes de hoy día? Surgen entonces las “joyas”, lo mejor y lo más caro; esos equipos que son utilizados por millonarios y personalidades de la industria del espectáculo, transformados en un accesorio que ofrece no solo facilidades de comunicación, sino elegancia y prestigio.
Es por ello que en la búsqueda de satisfacer los gustos más exigentes, nacen los teléfonos móviles considerados como los más caros del mundo. Uno de ellos es el “Iphone” 6, de la “Apple”, en su modelo de lujo. Su nombre “Diamond Ecstasy”, elaborado con oro de 24 quilates y decenas de diamantes. Su costo, la astronómica cifra de 3.5 millones de dólares.
Otra de estas “joyas telefónicas” es el “Vertu Aster Diamonds Red Alligator”, de fabricación británica. Puede costar hasta 9.600 dólares, y está fabricado de titanio pulido y forrado con piel de cocodrilo color rojo. En su carcasa de acero inoxidable, brillan más de 50 diamantes.
Le sigue, el “Kustom Ego”. Su precio base puede alcanzar los 11.000 dólares. Está elaborado con una aleación de titanio, muy resistente; unido en dos placas por un aro de plata u oro, según el gusto del cliente. Además, muestra incrustaciones de piedras preciosas como rubíes, amatistas y zafiros.
Asimismo, reconocidas y muy prestigiosas firmas como la casa “Dior”; no se han quedado atrás en esta tendencia de joyas telefónicas y lanzaron al mercado el “Dior Reveries Haute Couture”, con un costo de más de 116 mil dólares. Su pantalla es táctil y esta hermosamente decorada con diamantes, unos 1500 o más; así como perlas cultivadas y oro blanco de 18 quilates. Joyas móviles y quizás muy lejos del alcance de la gran mayoría.
ALFA