La cianita, también conocida como distena, es un mineral perteneciente al grupo de los silicatos. Su nombre proviene del griego “Kyanos”, que se traduce como “azul”. Típicamente, proviene de las rocas metamórficas, debido a un metamorfismo que sucede en la región, que presentan una gran cantidad de arcillas.

Una de las características más curiosas de este mineral es su propiedad anisótropa. Este término se refiere a la capacidad de la variación de la dureza, calificada en la escala de Mohs, siempre de acuerdo con la dirección en que el mineral fue cristalizado. Por lo general, esto caracteriza a casi todos los minerales, sin embargo, en el caso de la cianita, se le puede considerar como un rasgo distintivo de ella.

Si alguien trata de cortar una muestra de cianita perpendicularmente, se dará cuenta de que es extremadamente resistente, alcanzando una dureza  de 7.3 Mohs, no obstante, si se intenta cortar o rayar de acuerdo con su longitud, observará  que se puede partir o fracturar muy fácilmente. Puede ser un mineral sumamente frágil, y si es golpeada, es muy posible que se rompa. Sin embargo, algo que llama mucho la atención sobre este mineral es su densidad, ya que resulta incomprensible como un mineral tan duro puede ser quebrado tan fácilmente.

Además, una propiedad muy característica de la cianita es que no es soluble en ácido, por lo cual resulta la opción perfecta para eliminar algunos restos sedimentarios que puedan estar adheridos a ella. Otra propiedad que posee es la de ser infusible, e

sto significa que, por más que se intente, será imposible derretir o fundir una muestra de cianita, lo que explica su uso como aislante.

Es muy difícil encontrarla, y es por ello que suele ser muy valiosa. Comúnmente es utilizada en joyería, encontrándose creaciones que van desde colgantes hasta pulseras y anillos. Sin embargo, también tiene una gran extensión dentro del mundo industrial, como en la cerámica. De hecho, la cerámica más conocida y de una gran calidad, la porcelana, en realidad está hecha con cianita, que aporta ese especial color azulado que la caracteriza, así como le otorga las propiedades aislantes del fuego.

Asimismo, la cianita ha sido utilizada gracias a su propiedad refractaria en otras áreas como la metalurgia, en la cual se ha incorporado a diversos materiales que deben ser sometidos a altas temperaturas, con la necesidad de proteger del calor sus herramientas y las maquinarias que utilizan. También, aunque en menor medida, se puede utilizar la cianita en el campo de la electricidad, para componer algunos utensilios necesarios en la rama ya que, aunque en una mínima cantidad, este mineral también contiene algunas propiedades que aíslan la electricidad.

La cianita es una piedra muy particular y útil, en definitiva, es un mineral muy valioso para el desarrollo de distintas ramas, desde la ornamentación hasta las industrias pesadas, y resulta una gran maravilla de la naturaleza el poder conseguir un material con tantas propiedades aprovechables.

ALFA