Si de sortijas se trata, las siguientes joyas son consideradas las más codiciosas por el valor, la historia, y las personalidades que alguna vez las usaron, causando conmoción. Brillantes y exóticas, estas sortijas parecen de otro mundo, por lo que le advertimos que podrá quedar con la quijada colgando por un buen rato.
La boda del cantante, Justin Timberlake y Jessica Biel fue de ensueño. Su vestido era rosado, la ceremonia fue en Italia, y cada detalle estuvo a tono para hacer realidad un cuento de hadas. Lo más impresionante: los anillos. Una banda dorada con acabado martillado, mientras que la novia tuvo cuatro bandas apilables, hechas en oro blanco y rodio negro con diamantes incrustados.
Otra espectacular pareja de anillos fueron los de Angelina Jolie y Brad Pitt. Su boda fue íntima, realizada en Francia, con tan solo 22 familiares y amigos muy cercanos. Pero la noche deslumbró al sellar su amor con sendas sortijas de oro valoradas cada una en más de 600.000 euros.
Si de anillos de matrimonio se habló, el de la actriz Blake Lively acaparó la atención durante varias alfombras rojas. Creados por Lorraine Schwartz, la famosa ‘Serena’ ostentó como esposa de Ryan Reynolds una sortija con una piedra central de gran tamaño, rodeada por diamantes pequeños.
Puede que la historia entre Miranda Kerr y Orlando Bloom no haya sido la más feliz, pero luego de su divorcio en 2013, el recuerdo más bonito que le quedó al Ángel de Victoria Secret fue la gema de compromiso de 4 quilates, con un diamante en forma de óvalo, y de un valor de 65.000 dólares.
Otra famosa que acaparó los titulares con también una creación de Lorraine Schwartz, fue la que usó la socialité, Kim Kardashian. El breve matrimonio con Kris Humphries le dejó como recuerdo una sortija de 20.5 quilates de 2 millones de dólares. Quien.com (1 de diciembre de 2015)
Entre mujeres únicas han rondado las gemas más codiciadas, para muestra la bomba sensual de los años 50, Marilyn Monroe. Se comprometió con Joe Di Maggio usando una sortija de 34 diamantes. Otra dama recordada es Elizabeth Taylor a quien Richard Burton le obsequió un anillo de compromiso de 33 quilates que luego fue valorado en 8.8 millones de dólares.
Pero la historia no culmina acá porque Hollywood ha sido uno de los tantos lugares en los que se han visto algunas de las sortijas más codiciosas. Entre la realeza, la gema del príncipe, Rainiero de Mónaco para la actriz, Grace Kelly fue protagonista de varios titulares en la época. No es para menos. Un anillo de diamantes y rubíes, que luego complementó con un anillo solitario hecho de platino, y con una esmeralda de 10.5 quilates. Así mismo, la casa real inglesa tuvo la suficiente atención cuando Lady Diana usó un enorme zafiro azul de 18 quilates para oficializar su compromiso con el príncipe De Gales.
ALFA