Las vitaminas para la piel deben ser una parte esencial de nuestro régimen de belleza. Ya que, se trata del órgano más grande del cuerpo y por tanto debemos mantenerla nutrida para que siempre luzca hermosa y radiante. Aunque debemos cuidarla por fuera a través de la aplicación y uso de productos para el cuidado de la piel. Entre ellos tónicos, limpiadores, exfoliantes y humectantes adecuados. También podemos alimentarla bien desde el interior, ingiriendo las vitaminas y minerales que la mantienen saludable.

Imagen de Diamantino Santos en Pixabay 

Si bien las mejores fuentes de nutrientes para la piel son las frutas y verduras. Conocer cuáles son las vitaminas que ingerimos y los beneficios que proporcionan, nos ayudará a comprender en que debemos concentrarnos cuando se trata de cuidar nuestra piel. Así que, aquí le diremos cuáles son las principales vitaminas para la piel, como nos podemos beneficiar de ellas y donde podemos encontrarlas.

Las 6 mejores vitaminas para la piel

1. Vitamina A

Se conoce también como retinol, ya que produce los pigmentos en la retina del ojo. Esta es una poderosa vitamina antienvejecimiento, cuyos beneficios incluyen el aumento de la firmeza, el tono y la elasticidad de la piel. Además de promover la renovación celular y ayudar a prevenir el daño solar al interrumpir el proceso de descomposición del colágeno. Con deficiencias de vitamina A, su piel podría resecarse y causarle picazón o protuberancias.

Se puede encontrar abundantemente en alimentos como batatas, zanahorias, espinacas y mangos. Por su parte, un tipo de vitamina A llamada retinoide está presente en la carne de res, huevos y lácteos.

Esta vitamina es imprescindible para tener una piel saludable. Es por ello que las cremas con derivados de la vitamina A resultan eficaces para el tratamiento de las arrugas. Sin embargo, generalmente deben obtenerse con receta médica pues pueden causar irritación en algunas personas.

2. Vitamina B5

Esta vitamina del grupo B, es conocida también pantenol o ácido pantoténico. Sin duda, se trata de una de las mejores vitaminas para la piel y también para el cabello. Pues su aplicación tópica resulta excelente para hidratar, suavizar y curar no solo la piel sino también el cabello. De hecho, los productos para el cuidado de la piel que la contienen brindan la mejor hidratación que existe.

También se puede aplicar en el cuero cabelludo para fortalecer y estimular el crecimiento saludable del cabello. También se puede obtener de una gran cantidad de esta vitamina al consumir hígado de res, cereales integrales, atún, aguacate y pollo.

3. Vitamina C

La vitamina C es importante para cuidar nuestra salud en general, pero también es una de las mejores vitaminas para la piel. Se trata de una vitamina que puede ayudar a reparar el daño solar y agregar una capa adicional de protección contra los rayos UV.

Así mismo es un poderoso antioxidante que nos protege de los radicales libres, de padecer cáncer de piel y ayuda a sintetizar el colágeno. Un tipo de tejido conectivo que es responsable de mantener la firmeza y elasticidad de la piel. Por ello es que la vitamina C, resulta uno de los ingredientes clave en muchos productos antienvejecimiento y para el cuidado de la piel.

Bajos niveles de esta vitamina pueden ser causantes de hematomas y encías sangrantes, así como también de llagas de curación más lenta. Es posible obtener grandes cantidades de esta vitamina C al comer cítricos, cerezas, bayas, pimientos morrones, brócoli, fresas, coles de Bruselas y muchas otras verduras.

También se pueden tomar suplementos de vitamina C, pero resulta más beneficioso obtenerla a través de los alimentos. Pues, aprovechamos los beneficios de la fibra y todos los nutrientes que poseen las frutas y verduras.

4. Vitamina D

Esta vitamina también es conocida como la «vitamina del sol». Esto es debido a que nuestra piel puede sintetizarla a partir de la absorción de la luz solar, que es nuestra principal fuente de esta vitamina. Por lo cual, quienes no pasan mucho tiempo bajo el sol no obtendrán suficiente vitamina D. A menos que tomen suplementos o consuman productos fortificados con esta vitamina, como por ejemplo los cereales para el desayuno, la leche y el jugo de naranja.

Aunque también se puede obtener una dosis decente de esta vitamina al consumir alimentos como los huevos, el salmón, el atún enlatado, las sardinas y los hongos. Sin embargo, al ser una de las más importantes vitaminas para la piel y dado los altos riesgos de la exposición solar, muchas personas optan por tomar suplementos.

Investigaciones han determinado que esta vitamina cumple un papel importante en la lucha contra las infecciones y que su deficiencia en nuestro cuerpo se vincula con la aparición del acné.  También se ha demostrado que puede ser beneficiosa para reducir enfermedades de la piel como el acné, la rosácea y la dermatitis atópica.

5. Vitamina E

Al igual que la vitamina C, esta vitamina es un antioxidante cuya función principal es el cuidado de la piel protegiéndola del daño solar. Lo que puede ayudar a prevenir la aparición de manchas oscuras en piel y arrugas.

Normalmente la vitamina E de nuestro cuerpo se transporta a la piel a través del sebo. Esta es una sustancia aceitosa que emitimos a través de los poros para engrasar la piel. Si se mantiene un equilibrio adecuado, el sebo ayuda a mantener nuestra piel fresca, saludable y previene también la resequedad.

Esta vitamina es ampliamente conocida por su gran poder para ayudar a curar la piel y reducir la apariencia de las cicatrices. Pero, también potencia los efectos beneficiosos de otras vitaminas para la piel, como por ejemplo la vitamina C. Sin dejar de lado que resulta ideal para ayudar a hidratar la piel seca y agrietada. Razón por la cual muchos productos para el cuidado de la piel y el cuerpo la incluyen entre sus ingredientes clave.

Sin embargo, es mejor aplicar vitamina E tópicamente cuando no tengamos que exponernos al sol. Ya que, cuando la vitamina se expone al sol, produce una pequeña cantidad de radicales libres, que son dañinos. Por lo que es preferible consumir suficiente vitamina E en nuestra dieta.

Es conveniente mencionar, que también podemos obtenerla de los alimentos, siendo las nueces, las semillas y la carne de ganso especialmente ricas en vitamina. Aunque el aguacate, las semillas de girasol, las almendras, el aceite de oliva y el salmón también son fuentes de vitamina E.

6. Vitamina K

Esta vitamina es conocida particularmente por su aporte al proceso de coagulación de la sangre del cuerpo. Pero también hay evidencia de que es beneficiosa para curar heridas, hematomas y disminuir afecciones de la piel como la rosácea, arañas vasculares y estrías.

Esta vitamina la podemos encontrar en muchas cremas tópicas para la piel y puede ayudarnos a tratar varias afecciones de la piel. Inclusive los médicos suelen utilizarlas en pacientes que sean sometido a cirugías para contribuir a la reducción de la hinchazón y los hematomas. 

Otra forma de obtener suficiente vitamina K es a través de la dieta. Comiendo abundantemente hígado, leche y verduras de hoja verde que tienen la mayor concentración de vitamina, como, por ejemplo, repollo y col rizada.

Es importante destacar que actualmente podemos conseguir fácilmente suplementos multivitamínicos, por lo que debemos consultar con un dermatólogo o médico para comenzar a consumirlos. Ya que, es posible que ya estemos obteniendo suficientes cantidades de estas vitaminas para la piel a través de nuestra dieta diaria. Y solo un análisis de sangre puede determinar si existen deficiencias.

ALFA