Liberar emociones representa una de las alternativas de auto-sanación por excelencia. Cuando se realiza un ejercicio relacionada a la descarga emotiva, la plenitud de la mente, el alma, y el espíritu corresponden a un paraje paradisiaco sin igual. A continuación conocerá un poco más sobre la importancia que representan externalizar lo que se lleva por dentro, para renovar la propia energía aural.
Quiste energético. Las vibras negativas corresponden a una especie de quiste energético que han bloqueado el desarrollo integral de cada individuo. Desde el punto de vista espiritual y físico, la existencia de un agente negativo en el interior corresponde a la baja fluencia de la energía, propiciando diversos padecimientos.
Para el consultor en terapias energéticas, Heriberto Bluhm, las técnicas de liberación emocional corresponden a algo más allá que una alternativa de curación holística, tramada por ser una seudociencia, pues la misma psicología le emplea para poder superar un amplio espectro de problemas psíquicos.
“Las técnicas de liberación emocional son herramientas de autoayuda psicológica que podemos usar para superar todo tipo de problemas por el resto de nuestras vidas. Miles de terapeutas convencionales y psicólogos les están utilizando en sus consultorios de terapias psicológicas. Y esto se debe a los resultados que se obtienen”.
Entre las situaciones de salud solucionadas por la liberación emocional se tienen altos niveles de ansiedad, ataques de pánico, depresión por luto, dificultades de atención en niños, insomnio, compulsiones, obsesiones, manejo del dolor físico, e incluso, adicciones a la comida, al tabaco, al alcohol, demás drogas nocivas para el bienestar físico y emocional.
Ejercicio de sanación y liberación. La liberación emocional trabaja desde el subconsciente, lugar de la mente no consciente para la persona, pero que de igual manera determinan en gran medida su comportamiento. El inicio de toda sanación corresponde a la aceptación del problema que tanto le afecta, para luego realizar el ejercicio correspondiente, y reprogramar el subconsciente.
Determinando las emociones y aptitudes negativas, se pasará a su liberación con un ejercicio escrito. Sobre un trozo de papel se agregarán esos quistes energéticos mediante el siguiente mensaje: Me libero de estas emociones que tengo para siempre. Suelto la pena, suelto la tristeza, suelto la depresión, suelto la ansiedad, suelto la angustia, suelto el rechazo, suelto la frustración, suelto la inseguridad, suelto la ira, suelto la rabia, suelto el odio, suelto la impotencia, suelto la desconfianza, suelto el miedo… Lo suelto todo y me quedo libre y limpio.
Este primer paso llevará a la reprogramación del subconsciente mediante la fase consciente que previamente se ha logrado. El siguiente texto deberá decir: Ahora soy libre, ya pasó, ha quedado atrás, lo he soltado, me he liberado, y ahora, en el presente, me siento tranquilo, me siento en paz, estoy sanado.
La última frase puede ser escrita cuantas veces sea necesario. A manera de catarsis y para reforzar el subsconciente expuesto a luz. Finalizado el proceso de sanación que usted realice con el tiempo correspondiente a su caso, pasará a desechar cada escrito.
ALFA