En el mundo espiritual existen entidades divinas que a través de la historia han sido reconocidas por diferentes religiones, y que cumplen una misión específica en el plano terrestre. Unas de estas entidades con los arcángeles, mencionado además en la Biblia que es el libro de mayor reconocimiento mundial y que guía los pasos no sólo de los católicos, sino de muchas otras religiones a nivel mundial. Cabe señalar que, el término  arcángel proviene del griego “archángelos”, que aunque aparece sólo dos veces en  el nuevo testamento,  tiene una importancia significativa en los mensajes que allí se reflejan.

Este término está compuesto por el antiguo prefijo griego (arc) o en el prefijo (archo) que significan “el que gobierna, que lidera, que dirige o que comanda,” además del sustantivo “ángel”, cuyo significado es “mensajero”. De allí que, de acuerdo a los significados de esta palabra compuesta, y considerando la sintaxis del idioma griego y las  raíces de las cuales se deriva, el significado correspondiente al término arcángel sería dado “Ángel Principal” o  “Ángel Jefe”, o también “Mensajero Principal”.

Aun cuando se habla de los siete arcángeles, debe señalarse que en el año 745 el Papa Zacarías a través del concilio de Letrán aprobó únicamente el culto de los tres arcángeles principales como lo son Miguel, Rafael y Gabriel, y el  29 de septiembre del año 1969  se unificaron las festividades de estos  tres arcángeles, gracias a la reforma litúrgica de ese año, considerado a su vez como el día de la dedicación de una basílica en honor de San Miguel, la cual fue  elevada en el Siglo V en la vía Salaria.

En este sentido, la  Primera Jerarquía tiene como misión exclusiva la glorificación de  Dios, amándolo y alabándolo en su presencia; mientras que la segunda jerarquía está representada por los Serafines, Querubines y Tronos, y se encargan a través de la dominación, las virtudes y las potestades, de gobernar el espacio y las estrellas, siendo así considerados  como los máximos responsables del universo.

En cuanto a la Tercera Jerarquía, representada por Principados, Arcángeles y Ángeles, debe señalarse que  son las entidades que tienen como misión  intervenir en todo lo relacionado con las necesidades de la raza humana, lo cual se corrobora en la Biblia, donde se menciona la intervención de los arcángeles San Miguel, San Gabriel y San Rafael en la vida de los hombres, las naciones, ciudades e Iglesias, con misiones específicas dadas por el mismo Dios para cada de ellos.

De esta manera, según las distintas versiones que han dado tanto la iglesia católica como otras religiones y movimientos espirituales como la llamada Nueva Era, Dios ha encomendado a los arcángeles las misiones más importantes en relación a la vida de los hombres en la tierra, por lo que serían los guardianes de las personas que ostentan cargos importantes en el mundo y a los que  quién Dios ha asignado grandes misiones, como podrían ser el Papa, cardenales, obispos; y si nos guiamos por las misiones de relevancia para el mundo, allí deberían estar los presidentes de las naciones y altos funcionarios de las instituciones.

Desde la perspectiva de la iglesia católica, se  reconocen los nombres que se encuentran en las Sagradas Escrituras, mientras se considera que los demás nombres, que incluso varían de acuerdo a la religión o movimiento espiritual,  pueden solo tenerse como referencia, ya que no forman parte de la doctrina de la Iglesia, inclusive son catalogados como de origen ocultista o de la Nueva Era.

De esta manera, la Iglesia Católica reconoce la existencia de sólo tres Arcángeles mencionados en las escrituras, los cuales son:  Miguel cuyo nombre significa “¿quién como Dios?”, Gabriel que representa la  “fortaleza de Dios”  y Rafael cuyo significado es “medicina de Dios”, cuya  existencia representa una muestra  de fe y su  presencia en la Biblia es un testimonio de los planes de Dios, que encomendó a estos seres incorpóreos, espirituales y perfectos, misiones específicas en pro de la vida en el planeta tierra, convirtiéndolos en  sus siervos y mensajeros.

En general, la tarea de los tres Arcángeles, aparte de la contemplación de Dios, es llevar los mensajes divinos a los hombres, que a su vez representan la  voluntad del Creador,  además de llegar a ser los catalizadores de la gracia divina y una inspiración para los seres humanos.

Profundizando sobre la misión de San Miguel Arcángel, debemos destacar que su nombre  aparece especialmente en el Libro de Daniel de las Sagradas Escrituras,  específicamente  en la Epístola del apóstol San Judas Tadeo y el Apocalipsis, derivando su nombre del hebreo Mi-ka-El, que significa “¿quién como Dios?”, el cual se describe como un guerrero con armadura y  una espada, la cual desempuña con la intención de  atravesar a un dragón que posee una lanza y  que representa  al Demonio.

De esta manera, el rol  del Arcángel  Miguel es de un luchador que se enfrenta a los ángeles rebeldes que fueron  encabezados por Lucifer, y que fueron expulsados del paraíso en una guerra librada por los ejércitos celestiales comandados por él.

Dentro del contexto de la Iglesia Católica, el culto por San Miguel Arcángel comenzó nació en el Este de Europa, extendiéndose posteriormente y de forma muy rápida por todo el continente,  después de su aparición en una cueva de San Lorenzo Maiorano, población ubicada en Apulia, donde se conservó la tradición de realizar  peregrinaciones  para papas, soberanos y futuros santos.

Por los motivos expresados anteriormente, San Miguel Arcángel es el ‘guerrero celestial’, protector de los luchadores de batallas, de los maestros de armas, como los militares y/o policías,  y  también se ha convertido en el patrono de las personas que se dedican a actividades donde se usan básculas, tales como: comerciantes y farmacéuticos, debido a  sus habilidades como juez de almas.

Con respecto, al Arcángel Gabriel, cuyo nombre  proviene del hebreo y significa “Poder de Dios” o “Fortaleza de Dios”, es importante señalar que en la tradición bíblica era considerado uno de los ángeles más cercano al trono de Dios, hasta el punto de ser llamado “la mano izquierda de Dios”, presentándose como el ángel de la muerte, aunque  para los islamistas fue el ángel que reveló el Corán a Mahoma y representa a  uno de los principales mensajeros de Dios.

Asimismo, en la tradición cristiana San Gabriel es considerado como un     mensajero divino,  debido a que reveló a Zacarías el futuro nacimiento de Juan el Bautista, además de que fue él quien anunció a la Virgen María  su concepción milagrosa y del nacimiento de Jesús, así como también se le  apareció en sueños a José para hacerle desistir de repudiar a María por su embarazo inexplicable, haciéndole ver que  fue la obra del Espíritu Santo.

En el plano terrestre, el Arcángel Gabriel es considerado el protector de quienes trabajan en comunicaciones, carteros, embajadores, periodistas y mensajeros, debido a la misión que Dios le asignado en la tierra, sin embargo, para cualquier mortal San Gabriel es un guía que los orienta a través de los mensajes divinos que llegan a ellos, sobre todo cuando se invoca con fe y mucho amor.

En el caso del Arcángel San Rafael, su misión es traer sanación a los mortales, considerando que su nombre proviene del hebreo y significa “Medicina de Dios”, mientras que en la Biblia se menciona como uno de los ángeles más cercanos al trono de Dios, quien lo elige como el guía de Tobías en su viaje para recoger el crédito dejado por su padre.

Debido a que durante el viaje que realizó Tobías, el Arcángel  Rafael se manifiesta  en forma humana, para encontrar  una novia adecuada para él y además logra el milagro de recuperar la vista a su padre, por lo que es considerado como el patrono del amor conyugal, de los cónyuges, de todo lo que tenga que ver con la salud, médicos, enfermeras, farmacéuticos, así como de los educadores, los viajeros y los refugiados.

Por otra parte, frecuentemente se representa con un frasco con medicinas y pescado. Por lo tanto, su papel como sanador, se interpreta como la voluntad de sanar el alma y aliviarla de los sufrimientos.

Una vez explicadas las misiones de los tres arcángeles principales, debemos destacar que aunque en la Biblia se menciona por nombre solo a tres de los arcángeles, Miguel, Gabriel y Rafael, desde tiempos antiguos se ha considerado  que existen siete arcángeles, debido a que tanto en el Evangelio de San Juan como en el Libro de Enoc, se mencionan los siete espíritus que forman parte de la  tradición  judía y de los primeros cristianos.

Es así como, en los tiempos modernos con el resurgimiento de tradiciones espirituales milenarias, se ha despertado  el interés por los arcángeles, siendo motivo de debates y cuestionamientos, pero queda en cada persona la decisión de creer que existan tres, cinco, siete, o la cantidad que consideren, y acá lo que consideramos importante  es el significado de estas entidades y que  representan los ideales divinos que  impulsan al ser humano en dirección al amor divino.

Por este motivo, vamos a mencionar resumidamente a continuación los nombres, misiones y colores que identifican a los siete arcángeles mayormente conocidos:

Primeramente tenemos a San Miguel Arcángel, considerado como el jefe del ejército celestial, y se representa con el  color azul, seguidamente tenemos a San Gabriel, que es el mensajero celestial y su color es plata o blanco; mientras San Rafael, es el protector de la salud, de los viajeros y del noviazgo, y se encuentra representado por el color verde.

Los otros cuatro arcángeles son: Uriel, que es el encargado de las tierras y de los templos de Dios,  su nombre literalmente se significa “fuego de Dios” su labor es el de establecer la paz en el mundo y generalmente porta un vestido de color dorado.

Jofiel, cuyo  nombre significa “belleza de dios” tiene la labor de iluminar el espíritu de los bienaventurados y se representa con el  color amarillo pálido, mientras Chamuel es el arcángel del amor, su nombre significa “aquel que busca a Dios” y se representa con el color rosado. Finalmente, Zadquiel cuyo nombre significa “la justicia de Dios” y su color  es el violeta.

ALFA