El cáncer infantil es una realidad que cualquier padre puede llegar a enfrentar, por lo que el conocimiento resulta un gran aliado para para combatir la mayor cantidad de temores y confusión general. A continuación, conocerá algunas de las claves necesarias para entender más sobre el cáncer infantil.
El cáncer no tiene edad. Esta alteración celular puede presentarse tanto en niños recién nacidos como adolescentes jóvenes de 14 años de edad, siendo señalada como una de las causas principales de mortalidad infantil a nivel mundial. Entre los tipos de cáncer más común que pueden verse en niños están la leucemia, el cáncer de encéfalo, neuroblastoma y presencia de tumoraciones en el sistema nervioso.
Gama de tratamientos. El poder combatir el cáncer infantil cuenta con una variada gama de tratamientos. El pequeño puede ser sometido tanto a la quimioterapia, como a la radioterapia, la cirugía, la inmunoterapia y el trasplante de células madre. La elección final quedará en base al tipo de cáncer que se presente y el estado de su evolución.
Sobre las causas. El origen del cáncer infantil representa un enigma en la mayoría de los casos. Hasta los momentos solo se tiene señalado que el 5% de las tumoraciones cancerígenas en niños se presenta por consecuencia de una mutación hereditaria. Si bien en los adultos, las alteraciones celulares que diagnostican el cáncer son señaladas por envejecimiento o la exposición durante extensos periodos de tiempo a sustancias nocivas, en el caso de los niños, todavía no se ha hecho posible una identificación clara de las causas.
La clave de la detección temprana. El oncólogo pediatra, Luis García, afirma que la clave del cáncer es la detección temprana. “Es importante que los padres de familia cumplan los exámenes médicos periódicos y visiten al pediatra o médico general por lo menos una o dos veces al año. Asimismo, deben estar atentos a algunas señales que pueden ser indicio de que nuestro niño sufre de algún tipo de mal oncológico”. El especialista agrega que entre los principales indicios del cáncer infantil que un niño puede presentar están los signos de anemía, las infecciones continuas, el fácil sangrado, la distensión abdominal, y notables cambios neurológicos.
No existe el si hubiera hecho. El también oncólogo pediátrico, Luis Clavell, señala que el si hubiera hecho no existe, pues el cáncer infantil no puede prevenirse. “Este cáncer es un evento al azar, esporádico. Aunque, es importante reconocer el mínimo indicio de condiciones congénitas para establecer el seguimiento o intervención necesaria, lo que a futuro logrará evitar el desarrollo de la anomalía, con el aseguramiento de la detección temprana.”
Valentía y esperanza. El hacer frente al cáncer infantil debe ser un acto de valentía y esperanza. Un diagnóstico de tal tipo representa un reto para todo el círculo familiar. Lo importante, es prepararse con la mayor cantidad de información posible, para poder explicarle al pequeño los cambios que podrá experimentar.
ALFA