Las piedras preciosas sintéticas existen en el mundo de la joyería desde finales del siglo XIX. Aunque actualmente y por diversas razones se afianzan como una opción a considerar cuando se habla de joyas de gran calidad y belleza.

Esto se debe en gran parte al perfeccionamiento en los métodos de sintetización, Algo que ha permitido producir piedras preciosas sintéticas, con la máxima pureza. Pero también con una excelente saturación de color y con otras propiedades ópticas que inclusive pueden llegar a superar a las piedras preciosas naturales.

Piedras preciosas sintéticas Gemas
Imagen de sara graves en Pixabay 

Sin embargo, a pesar de no ser tan nuevas en la joyería, todavía las piedras preciosas sintéticas tienen una reputación dudosa debido a sus orígenes. Ya que muchas personas todavía no entienden lo que son las piedras preciosas sintéticas. Así que, para traer un poco de claridad en el tema, aquí le traemos más información sobre ellas.

¿Qué son las piedras preciosas sintéticas?

Para muchas personas, el hecho de escuchar las palabras «sintético» y «hecho por el hombre», es automáticamente un sinónimo de se trata de algo falso. Análogamente entonces, son muchas las personas que creen que al hablar de piedras preciosas sintéticas estamos hablando de piedras preciosas falsas o que están hechas de vidrio.

Lo cual es un concepto bastante erróneo con respecto a las piedras preciosas sintéticas. Pues, aunque se trata de piedras preciosas que se pueden fabricar en un laboratorio, comparten la misma composición mineral de una piedra preciosa natural.  En otras palabras, son piedras preciosas reales que pueden tener las mismas características químicas, ópticas y físicas de sus contrapartes naturales.

Por ejemplo, la única diferencia entre un diamante natural y un diamante creado en laboratorio es la forma cómo ese carbono se comprimió en una gema, ya sea por naturaleza o por tecnología. Pero como lo habíamos mencionado las piedras preciosas sintéticas incluso pueden superar las propiedades naturales de una piedra preciosa.

Por supuesto, un proceso que le toma a la naturaleza miles de años, el hombre lo imita en un entorno controlado en cuestión de meses. Así que es posible controlar sustancias químicas, minerales, temperatura y presión para «hacer crecer» cada piedra preciosa.

¿Porque entonces no son tan populares?

A pesar de las piedras preciosas sintéticas son exactamente iguales a las naturales en términos de composición química. Todavía existen percepciones negativas y una de ellas es que se trata de piedras artificiales. Por lo cual, muchas personas disfrutan más de las connotaciones románticas que tiene una piedra natural, a pesar de tener inclusiones y defectos. Los cuales forman parte de la identidad de una piedra preciosa natural y la distinguen del resto de las gemas.

Sin embargo, las piedras preciosas sintéticos tienen sus propios beneficios. Y actualmente gracias a un grupo creciente de clientes con hábitos y valores de compra particulares, cada día están ganando más popularidad.

Piedras preciosas sintéticas: Los pros

Excelente calidad

Las piedras preciosas sintéticas, debido a cómo se crean, se fabrican para ser casi impecables en términos de color y claridad. Es mucho más fácil conseguir un zafiro sintético que sea azul real y limpio con lupa, por ejemplo, que esperar en el mercado para comprar un zafiro natural con las mismas características.

Gran asequibilidad

Comprar una piedra preciosa natural y grande de alta calidad es extremadamente caro en comparación con una piedra preciosa sintética. Debido a cómo se producen y descubren las piedras preciosas naturales, las posibilidades de encontrar una piedra con un determinado conjunto de características (peso en quilates, color, claridad) son difíciles, lo que aumenta significativamente el precio.

Por otro lado, las piedras preciosas sintéticas se pueden fabricar fácilmente con esas especificaciones particulares, y hay una gran oferta.

Ambientalmente sostenible

Se sabe que el proceso de extracción de piedras preciosas naturales y diamantes es perjudicial para el medio ambiente, ya que causa erosión del suelo, deforestación y contaminación del agua. Si bien se han establecido regulaciones para reducir el impacto de la minería en el medio ambiente, es difícil regular en todos los ámbitos, y los proveedores continúan utilizando métodos poco éticos para obtener sus piedras.

Por otro lado, las piedras sintéticas se pueden crear con algunos productos químicos y máquinas en un laboratorio controlado. Los requisitos tecnológicos, como el equipo y la experiencia necesarios para fabricar piedras preciosas sintéticas, limitan la producción a varias personas.

Éticamente responsable

Los diamantes son conocidos por su reputación desagradable; como muchos se extraen en países africanos devastados por la guerra, se han utilizado para financiar conflictos masivos como la guerra civil de Sierra Leona.

Si bien el Proceso de Kimberly se creó para rastrear el origen de las piedras y evitar que ocurra esta financiación ilegal, muchos clientes prefieren evitar alimentar una industria conocida por su falta de transparencia. Los diamantes sintéticos son una excelente manera de disfrutar del brillo y la belleza de sus joyas sin cuestionar sus orígenes, ya que sabe exactamente dónde se crean.

Piedras preciosas sintéticas: Los contras

Valor de reventa bajo

Si bien las gemas sintéticas son maravillosamente baratas, esto también reduce el valor de reventa si está buscando vender algunas de estas piezas más adelante. En comparación con las piedras naturales, simplemente no son tan valiosas porque se obtienen fácilmente.

Aspecto demasiado impecable

Algunas personas prefieren el aspecto de gemas naturales debido a las imperfecciones. Se pueden crear gemas sintéticas para imitar ese aspecto, pero las gemas sintéticas del mercado masivo tienden a inclinarse hacia la estética clara y perfecta. Esto desanima a algunos compradores que disfrutan ver inclusiones en sus joyas.

ALFA