Por alguna razón hay personas que ni de chiste pasarían debajo de una escalera, entregarían la sal en la mesa, ni se tranquilizarían ante la presencia de un gato negro. Muchas de estas creencias se deben a raras supersticiones alrededor del mundo, que carecen de explicación, pero aún así las evitamos a toda costa.
Según de donde seamos hay raras supersticiones que se hacen habituales porque las escuchamos desde pequeños. Sin embargo, hay muchas que ni siquiera seríamos capaces de imaginar, como las que comentaremos a continuación.
En Grecia existe la creencia de que tener un cactus en la puerta de la casa es suficiente para ahuyentar el mal. Prácticamente en ninguna casa de la isla falta una planta de esta especie.
Para los franceses es muy importante la posición en la que se guarda el baguette. Por ningún motivo este debe estar volteado sobre la mesa o sobre el lugar de almacenamiento, ya que esta posición se relaciona con la mala suerte.
En Turquía se considera que mascar goma de noche es masticar la carne de la muerte. De seguro no muchas personas querrán invocarla y buscarán cualquier otra opción para refrescar su aliento.
Para los coreanos soñar con cerdos es un buen augurio. Según la tradición del país asiático, estos animales son sinónimo de riqueza y prosperidad. Por el contrario, abrir y cerrar tijeras sin cortar nada o dejarlas abiertas es lo peor que se puede hacer en Egipto, cuando se quiere alejar la mala suerte. Para los egipcios, las tijeras son una señal de mala suerte, aunque hay una excepción, ya que recomiendan colocarlas debajo de la almohada para alejar las pesadillas…algo un poco peligroso.
Haití es un país conocido por su creencia en las supersticiones y en las fuerzas sobrenaturales. Por lo cual, es uno de los lugares en donde se albergan las supersticiones más raras. Caminar con un solo zapato, barrer la casa por la noche o comer la cáscara de una sandía podría causar la muerte de la madre de quien lo haga.
En Lituania no se permite silbar en espacios cerrados porque se considera una forma de invocar demonios. Por otro lado, en Nigeria existe la superstición de que si un hombre se golpea con una escoba, está destinado a quedar impotente o a perder sus genitales. Esta superstición tiene una contra; el condenado queda libre de caer en desgracia si con la misma escoba golpea a un delincuente siete veces.
La mayoría de las más raras supersticiones alrededor del mundo se relacionan con la mala suerte y la pérdida de dinero. Aunque siempre hay quien reacciona con escepticismo frente a las supersticiones, pocos se atreven a asumir el reto de desobedecerlas.
ALFA