Actualmente el estrés es causa de muchas enfermedades tanto físicas como mentales. La tensión y las preocupaciones pueden generar agotamiento extremo, lo que trae como consecuencia numerosos daños que disminuyen la calidad de vida de las personas. El dolor de cabeza constante, el sobrepeso, la obesidad, el acné, la piel seca, la pérdida del cabello, la depresión y los tics nerviosos son algunos de los síntomas más comunes de las víctimas del estrés. Si el trabajo y la rutina diaria te abruman, sigue estos consejos para relajarte desde tu propio hogar, sin necesidad de ir a un spa y gastar una gran cantidad de dinero.

Un masaje relajante al finalizar el día puede acabar con el cansancio acumulado. Pide ayuda a un colega para realizarlo y consigue un aceite aromático para el cuerpo. Tu compañero deberá recorrer tu espalda con sus dedos llenos de aceite, ejerciendo presión en los omoplatos. Esto ayuda a tener un sueño más profundo durante la noche.

Para acabar con el estrés de raíz no hay nada como el yoga, pues es el deporte rey en el mundo de la relajación. Puedes acompañar la sesión con vídeos de música. Estírate, comenzando desde el cuello hasta terminar en los tobillos. Otra opción es una rutina de entrenamiento. Al hacer ejercicios el cuerpo quema adrenalina y se siente mucho más ligero. Un poco de footing o unos cuantos abdominales cada noche te ayudarán a dormir mejor. Una caminata al amanecer también puede liberar tensiones.

La cara refleja tus emociones, por lo tanto, un adecuado cuidado ayudará al funcionamiento de tu anatomía. Cada mañana humedece tu rostro y extiende gel o crema exfoliante a través del mismo. Date masajes circulares y aclárate con abundante agua. Posteriormente, un poco de crema hidratante libre de grasa conseguirá la tersura ideal para tu piel.

La estimulación del olfato es un poderoso agente relajante. La aromaterapia consigue desaparecer el estrés con tan solo acercar un par de aceites esenciales a tu nariz. Los aromas naturales son capaces de hacer sentir al organismo más sereno y tranquilo. Para quedar más a gusto, no hay nada como un baño caliente. Lo único que necesitas es llenar tu bañera con agua templada y agregar un puñado de sales para que salga abundante espuma. También algo de música siempre logra despejar la mente. Al concluir, no olvides masajear tu cuerpo con alguna crema humectante.

Es necesario llevar una alimentación balanceada en tu día a día. Está comprobado que los alimentos altos en grasa producen niveles de estrés inmediato y causan insomnio, además de un grave deterioro en la piel. El consumo de agua también es de alta prioridad.  Siguiendo estos consejos podrás liberarte del agotamiento y llevar una vida plena, olvidándote de los problemas del día a día. Vivir en confort saca al máximo tus capacidades y mejora tu salud. Recuerda que no es necesario pagar por costosos tratamientos para estar en contacto con tu lado Zen.

ALFA

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