Existen supersticiones de la suerte que son comunes y que muchas personas, aunque quieran o no, siguen con la esperanza atraer la buena suerte. Desde cruzar los dedos mientras se espera un buen resultado hasta pedir un deseo mientras apagamos las velas de cumpleaños, existen muchos ejemplos. Si bien todas estas creencias son contrarias a la razón y no parecen tener ningún sentido más que una explicación mágica, no dejamos de hacerlas. Tal vez porque en el fondo queremos creer.
Por ello, ya sea que usted crea o no en las supersticiones de la suerte seguramente querrá saber sobre ellas y su origen. Entonces siga leyendo hasta el final, porque aquí hablaremos de algunas.
Supersticiones de la suerte más famosas
Cruzar los dedos para tener buena suerte
El origen exacto de esta superstición es desconocido, aunque existen dos posibles teorías para explicar de dónde surgió la idea, una cristiana y otra pagana.
Según la explicación pagana, el hecho de que crucemos los dedos se debe a la creencia extendida de que existen espíritus en los cruces. Por lo que, al simular un cruce con los dedos, era posible invocar un buen espíritu que ayudara a hacer realidad un deseo.
Otra teoría es que en la antigüedad cruzar los dedos alejaba a los malos espíritus. También cuando una persona pedía un deseo, solían cruzar los dedos con otra para pedir conjuntamente un deseo. Ya que esto haría más probable que el deseo se hiciera realidad al formar una cruz. Un símbolo que era considerado como poderoso incluso antes del cristianismo.
Sin embargo, esta práctica se iría simplificando hasta que se extendió la idea de cruzar los dedos de una misma mano para alejar los malos augurios y pedir deseos.
Por su parte, según la teoría cristiana, durante los primeros días del cristianismo, los romanos intentaron evitar la expansión de la fe cristiana. Pero, para evitar la persecución, los cristianos tenían que usar señales secretas para poder comunicarse entre sí.
Se cree que una de estas señales puede haber involucrado hacer una cruz con los dedos, especialmente cuando oraban pidiendo ayuda. Esto para que el poder de la crucifixión de Jesucristo les ayudara. Igualmente se utilizaba cuando los cristianos debían mentir obligados por quienes los perseguían, y este gesto les absolvía de estas mentiras. Por eso mucha gente cruza los dedos detrás de la espalda cuando miente.
Tocar madera para tener suerte
Esta es otra de las supersticiones de la suerte son orígenes controvertidos e inciertos. Aunque la explicación más común, proviene de la creencia de que los arboles eran sagrados al ser la morada de los dioses. En especial, la madera de roble era la más admirada, ya que se decía que el roble era hogar de Dios y era la forma en que éste tomaba vida terrenal. Por cual, la gente tocaba madera para pedir ayuda a los dioses o para agradecerles su ayuda.
Otra explicación asocia esta superstición con la madera de la cruz en la que fue crucificado Jesucristo. Pues se creía que, tocando la cruz o la madera de la cruz, la persona podía obtener protección o buena suerte, también asociado a un Dios terrenal como Jesucristo.
Pedir un deseo cuando soplamos las velas de un pastel
Esto es algo la mayoría de nosotros hacemos una vez al año durante el día de nuestro cumpleaños. Un ritual que se repite con exactitud en casi todos los países del mundo. Pero, al igual que ocurre con otras supersticiones de la suerte, es normal que nos preguntemos ¿De dónde surgió esta creencia?
Una de las versiones más conocidas nos transporta a la antigua Grecia. Se cree que los griegos horneaban pasteles redondos y colocaban velas sobre ellos cuando querían pedirle su favor a la diosa de la luna, Artemisa. La forma redonda simboliza el ciclo lunar completo y las velas debían apagarse de un soplido. Para que el humo de las velas transmitiera los deseos a la diosa a medida que se elevaba en el aire.
Lanzar una moneda a una fuente
Aunque el origen de esta superstición de la suerte no está muy claro. Se cree que proviene de la antigua creencia de que el agua estancada tenia propiedades curativas. Una creencia que se popularizo rápidamente, gracias a algunos pueblos entre ellos los Celtas. Quienes estaban convencidos de que en el interior de esos lugares habitaban seres divinos, los cuales concedían deseos.
Sin embargo, los deseos que se pedían en la antigüedad estaban relacionados solamente con la salud. Pero, a medida que el tiempo avanzó y las civilizaciones evolucionaron la tradición también cambió. Sustituyendo así, las piedras por monedas y los deseos sobre salud por deseos de todo tipo. Las razones para este cambio, es que resulta más fácil que una persona tenga una moneda encima y que son consideradas como símbolos de buena suerte.
Encontrar un trébol de cuatro hojas
Esta es una de las supersticiones de la suerte más conocidas y su origen se remonta al jardín del Edén. Ya que, se decía que Eva luego de ser desterrada llevo consigo un trébol de cuatro hojas como recuerdo. Por lo que se cree que el trébol de cuatro hojas es un pedazo del jardín del Edén.
También se dice que las hojas representan los elementos de la felicidad: amor, salud, prosperidad y buena suerte. Por otro lado, según las estadísticas, la posibilidad de encontrar un trébol de cuatro hojas es de una entre 10 mil, así que podemos considerarnos afortunados si conseguimos uno. Del mismo modo en que podemos pedir deseo después de ver una estrella fugaz, definitivamente algo poco frecuente.
Recoger una moneda para tener buena suerte
Esta es otra de las supersticiones de la suerte, que también es antigua. Ya que hace mucho tiempo, el metal era muy escaso y se creía que encontrar una pieza de metal era un regalo de los dioses. Y por lo tanto ese regalo protegería a quien lo encontrara de la mala suerte.
Como puede ver, ya sea que creamos o no en alguna de estas supersticiones de la suerte. Una cosa si es incontrovertible: seguirlas haciendo, al menos incrementa la sensación de sentirnos con “suerte”.
ALFA