Subir en los trenes del Transiberiano, es vivir una aventura inolvidable; una experiencia maravillosa que implica hacer el viaje más largo, en el sistema ferroviario más amplio del mundo. Su recorrido total es de 9.288 kilómetros de largo, uniendo a Rusia Europea con provincias del lejano oriente ruso, Corea del Norte, República Popular China y Mongolia.Transiberiano_2_joya_life

La historia de esta red de ferrocarriles, se remonta al año 1860 con el deseo de Rusia en tener un puerto sobre el Océano Pacífico; fundándose la ciudad portuaria de Vladivostok. Con el tiempo la falta de comunicación entre las demás ciudades era un inconveniente; motivo por el cual se empezó a construir el Transiberiano. En el año 1890, se edificó un puente sobre el Río Ural; permitiendo el acceso de esta línea ferroviaria en Asia. La mano de obra en la realización del Transiberiano, estuvo a cargo de convictos de la Isla Sajalín y soldados rusos.

El mayor problema en el trayecto era el Lago “Baikal”, el más profundo del mundo. Al llegar allí, el traslado del tren se hacía en una embarcación rompehielos, debido a las bajas temperaturas del lago en invierno; mientras los pasajeros eran enviados en trineos de un lado a otro, hasta que finalmente se resolvió con la traza de la locomotora bordeando el extremo Sur del Lago. El método de alimentación eléctrica de la línea, se inició en 1929; finalizando en pleno sigo XXI en el año 2002. De esta manera, se pudo duplicar el volumen de carga de los trenes; alcanzando más de 6000 toneladas.

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Las rutas comprenden tres servicios de trenes principales: Transiberiano ferrocarriles, que recorren la ruta principal desde Moscú hasta Vladivostok; “Transmanchuriano” expresos, que atraviesan la región china de Manchuria; y por último, “Transmongoliano” trenes, que conectan la ciudad “Ulán Ude” con la localidad china de “Jining” a través de la población de Ulán Bator en Mongolia.

Se hacen varias paradas en el trayecto, permitiéndoles a los viajeros conocer la conversión entre los países europeos y la lejana Siberia Asiática. Igualmente, el recorrido pasa por siete husos horarios, y el viaje dura siete días.

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Hay diferentes medios para comprar los boletos. Lo puede hacer en una agencia de viajes, en la estación ferroviaria “Yaroslavsky” en Moscú, y por medio de la  página web de los ferrocarriles rusos. Las comodidades no faltan a bordo de los trenes, con asientos que se adaptan como camas y compartimientos al estilo europeo o simplemente literas. Además, dispone de agua caliente, baños y un bar compartido con todos los pasajeros.

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De igual manera, disfrutará de un restaurante; pero si prefiere, en las paradas que hace el tren con una duración de media hora, sería un momento propicio para comprar comida y bebida. En el canal “YouTube” “euronews”, podrá admirar un viaje en el Transiberiano.

Viajar a bordo de estos impresionantes trenes es cautivador. Recorrer por tantos días las diferentes rutas de esas ciudades es algo mágico; dejándose llevar por la hermosura de sus majestuosos paisajes.

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ALFA