Para muchos la belleza es efímera y algunas veces se le considera hasta superficial, sin embargo, uno de los temores al que más le huyen las mujeres son los signos del envejecimiento, como las arrugas por ejemplo. Por esta razón se cuidan mucho la piel con cuanto tratamiento sale al mercado. Una de sus pesadillas más recurrentes son las llamadas patas de gallo, por ello hoy obtendrá consejos que la ayudaran a deshacerse de ellas.

Para comenzar debe saber qué son y de dónde provienen las desagradables patas de gallo. Bien, las patas de gallo son arrugas de expresión y las arrugas son líneas o pliegues que aparecen en el rostro de hombre y mujeres a partir de cierta edad; y, dependiendo de la edad serán más superficiales o más profundas.

¿A qué se debe la aparición de las mismas? Algunas de sus causas están relacionadas con cada persona, es decir factores genéticos, hormonales y el estrés, pero a nivel general también pueden estar relacionadas con condiciones externas como el consumo de alcohol, tabaco, mala alimentación, sedentarismo e incluso el sol.

También se han asociado los problemas de visión a las causas de la aparición temprana de las patas de gallo, por ejemplo sufrir de miopía o cualquier trastorno en la visión provoca que se force la vista, por lo que generalmente se entrecierran los ojos, dicho movimiento provoca la aparición de estas indeseables arrugas. Otro factor causante podría ser el hígado, pues todas las partes del cuerpo se conectan, en el caso del contorno de los ojos, se le relaciona con el hígado. Por ello si estas arrugas aparecen a muy temprana edad, no deje de chequearse con su médico.

Asimismo, no se pueden detener los efectos del paso del tiempo, ya que con el mismo la renovación celular va disminuyendo, la piel va perdiendo elasticidad y se van formando las arrugas.

Por lo tanto, existen varios tipos de arrugas y casi todas tienen nombres propios, como las arrugas mecánicas, estas son las que aparecen con contracción repetida de los músculos faciales y las arrugas estáticas que son aquellas originadas por la gravedad y la flacidez de la piel.

Las más recurrentes son las mecánicas, ya que son movimientos que se hacen constantemente de forma involuntaria, entre las cuales se encuentran los surcos nasogenianos, las arrugas del entrecejo y las temidas patas de gallo.

Las patas de gallo según el portal viviendo la salud, están definidas como las arrugas que aparecen en el extremo externo de los ojos, las mismas se ubican en el músculo de nombre orbicularis oculi. Dicho músculo forma una elipse alrededor del ojo y es el que permite cerrar o entrecerrar los ojos cuando se está frente a una luz brillante.

Asimismo, el Doctor Rodrigo Loubies, dermatólogo de la Sociedad Chilena de Dermatología, explica que la piel que se ubica alrededor de los ojos es delgada y va muy pegada al músculo orbicular, el cual se contrae cada vez que se pestañea. Al transcurrir el tiempo, cuando la persona gesticula, dicho músculo va ejerciendo presión a la piel, lo que va produciendo dichas marcas.

Sin embargo, estos pliegues a su vez representan procesos profundos, complejos y lentos que se llevan a cabo en las diferentes capas de la piel como lo son la epidermis y la dermis. Adicionalmente, el funcionamiento de la misma se vuelve cada vez menos eficiente, disminuye la elasticidad y el proceso celular y por ende la producción de moléculas pierde intensidad. Por supuesto que allí se incluye el colágeno que se encarga de proveer la firmeza de la piel, así como la baja producción de las glándulas sebáceas por lo que la piel se deshidrata.

Aunque es muy difícil ir en contra de los efectos de la edad, actualmente existen procedimientos que no solo le ayudarán a tratarlas también a prevenirlas a tiempo. Uno de los elementos que le favorece es el ácido hialurónico. Elija una crema humectante que tenga este ácido o retinol y que le ayude a engrosar la piel, de igual manera si puede incluir algún antioxidante como el té verde, el cual apoyará la protección el colágeno de los radicales libres.

Otro consejo a tomar en cuenta es que debe utilizar productos específicos para el contorno de los ojos, aplicar la crema con el dedo anular o con el meñique y esparcirla con pequeños golpecitos y difuminarla de adentro hacia afuera. De igual manera no olvide aplicar protector solar al menos de SPF 30. Dicho ritual debe realizarlo tanto por la mañana como por la noche. De acuerdo a las estadísticas podría conseguir reducir las patas de gallo al menos en un 10%.

De igual manera, evite abusar del consumo de bebidas carbonatadas y del alcohol. En cuanto al sol, evite largas exposiciones o al menos protéjase con una crema de alto factor de protección cada mañana e incluya en su dieta alimentos con gran cantidad de antioxidantes.

Ahora bien, mientras las cremas hacen efecto también puede ayudar a disimularlas con el maquillaje. ¿Cómo? Aplicando un primer que contenga silicón, poco a poco sin ejercer mucha presión, con ello las patas de gallo se rellenarán y quedarán satinadas; permita que el primer se fije al menos por dos minutos. Otro truco de maquillaje es prescindir del polvo translucido y en su lugar aplicar un iluminador.

Finalmente, tome en cuenta todos los consejos, pero sobre todo cuide su alimentación y su hidratación desde temprana edad, establezca una estricta rutina de belleza tanto para iniciar, como para culminar el día. Jamás deje de retirarse el maquillaje antes de dormir y aplicar las cremas que le ayuden a reponer aquellos componentes que se van perdiendo por el paso de los años.

ALFA