Es posible que en ocasiones se deje llevar hacia la negatividad, por lo que debe buscar formas para ser más optimista y dejar de ver el vaso medio vacío, y empezar verlo medio lleno. Pocos saben que ver el mundo desde una perspectiva más positiva puede mejorar su salud. Y aunque una perspectiva optimista sea buena no significa que sea fácil. Puede ser difícil mantener una actitud positiva, especialmente si su inclinación natural es hacia la tristeza y la fatalidad.

Afortunadamente, hay formas para ser más optimista que son sencillas y fáciles de poner en práctica. Siga leyendo y entérese cómo puede mirar el lado positivo de las, incluso cuando sienta que las adversidades están nublando su vida.

El optimismo

Las personas con perspectivas optimistas tienen esperanza y confianza en el éxito y un futuro positivo. Mientras que, los pesimistas tienden a darle un giro negativo a las situaciones.

El cerebro juega un papel importante en esto. Los estudios indican que los estados de ánimo positivos están relacionados con una mayor actividad del lado izquierdo del cerebro. Estados de ánimo negativos, como sentirse deprimido o experimentar ira o rechazo, se asocian más con la actividad cerebral lado derecho.

Pero si bien la genética juega un papel en su perspectiva, no es lo único que determina quién es usted. La experiencia de la vida, particularmente en lo que se refiere al entorno familiar de su infancia, también lo hace.

¿Usted es optimista?

Los científicos creen que el optimismo y el pesimismo caen en un espectro. Los psicólogos llaman a esto optimismo disposicional. Es la medida en que cree que se producirán resultados positivos en el futuro, para usted, para otros que conoce y para el mundo en general.

El optimismo también puede variar hasta cierto punto según el tema y el contexto. En términos generales, los optimistas comparten algunas características comunes. Puede ser optimista si:

  • Espera que las cosas funcionen de la mejor manera
  • No deja que una mala experiencia arruine sus expectativas para el futuro
  • Siente gratitud por las cosas buenas de su vida
  • Considera que los desafíos y los obstáculos son una oportunidad para aprender
  • Cree que las cosas buenas pueden provenir de eventos negativos
  • Siempre está buscando formas de aprovechar al máximo las oportunidades

Los beneficios de ser más optimista

Una visión optimista de la vida ofrece otra razón para sonreír: puede beneficiar su salud. La investigación dice que los optimistas:

  • Tienen mejor salud cardiovascular
  • Experimentan niveles más bajos de dolor
  • Tienen tasas de supervivencia más altas después de un diagnóstico de afecciones médicas como cáncer, diabetes tipo I y VIH o SIDA.
  • Hacen más ejercicio
  • Son menos propensos a fumar
  • Duermen más y gozan de un sueño de mejor calidad
  • Experimentan menos estrés
  • Tienen redes sociales más extensas
  • Manejan mejor sus relaciones
  • Son más efectivos para lidiar con los factores estresantes y el trauma y en el uso de estrategias de afrontamiento

8 formas de ser más optimista

Si usted es un pesimista por naturaleza, es posible que esté pensando no hay forma de que se beneficie de los efectos sobre la salud del optimismo. Es posible que todavía no esté cosechando los beneficios del pensamiento positivo, pero puede cambiar eso. Hay acciones específicas que puede tomar para aumentar su nivel de optimismo.

1. Pruebe técnicas de atención plena para ser más optimista

Es posible que haya escuchado la teoría del pensamiento del cerebro derecho e izquierdo. Esencialmente, la idea es que las personas del cerebro derecho gravitan hacia campos creativos como las artes, mientras que los pensadores del cerebro izquierdo se inclinan hacia campos más analíticos como las matemáticas.

Si bien no hay pruebas de que su naturaleza o personalidad esté centrada en un lado de su cerebro o en el otro, las investigaciones han demostrado que las personas creativas pueden ser más propensas a ser pesimistas o tener una perspectiva negativa.

Si tiende a caer en la categoría creativa, no se preocupe. La investigación, descubrió que el cerebro puede reconfigurarse alterando conscientemente nuestros pensamientos utilizando técnicas de atención plena. Esto puede conducir a un cambio significativo en la forma en que respondemos a las experiencias.

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2. Redefinir el optimismo

No asuma que para ser optimista tiene que negar por completo los desafíos de la vida. Aunque la felicidad puede resultar en optimismo y hace que sea más fácil tener una perspectiva optimista, los dos son completamente diferentes.

Tener una perspectiva optimista no significa que siempre tengas mucha alegría o que todo vaya bien en tu vida. En cambio, es una creencia en resultados positivos, incluso frente a pruebas y tribulaciones.

3. Concéntrese en lo que puede controlar

Puede ser tentador reflexionar sobre el pasado, lo que pudo o debería haber sido. Igualmente, es atractivo pensar sobre un futuro incierto. Ninguna de estas acciones le ayudará a adoptar una perspectiva optimista.

Los psicólogos recomiendan permanecer presente en el momento. Esto hace que sea más fácil para usted mantenerse enfocado, centrado y más positivo porque no está lidiando con hechos desconocidos. Concéntrese en las cosas que puede controlar ahora. Por ejemplo, si no obtuvo una gran promoción que deseaba, no se detenga en lo negativo. Concéntrese en lo que puede hacer ahora para alcanzar su objetivo.

4. Tome tiempo para usted mismo

Tranquilice su mente y tómese un tiempo para usted, aunque sea solo 30 minutos a la semana. Tome un baño largo, abra un libro, salga a correr o vea su programa favorito. Lo que haga no importa tanto como le haga sentir. El objetivo es participar en una actividad que sea relajante y que disfrute.

5. Practique la gratitud

Dedique más tiempo a reflexionar sobre los aspectos positivos de su vida que en las áreas que le gustaría mejorar. Un diario de gratitud puede ayudar. Intente comenzar su día escribiendo tres cosas o personas por las que esté agradecido. Reflexione sobre por qué estas cosas o personas son valiosas para usted.

6. Sea bueno

Practica ser amable con los demás, incluso en momentos de estrés o en momentos en los que te sientas desafiado. En muchos casos, ejercitar la bondad es más beneficioso para el que da que para el que recibe.

7. Elimine los pensamientos negativos de raíz

Es normal que los pensamientos negativos se presenten de vez en cuando. Seamos realistas: la vida puede complicarse. La mayoría de la gente no anda todo el tiempo cantando y saltando de felicidad.

Pero los expertos aseguran que es una buena idea desafiar los pensamientos negativos. Puede pensar “no conseguí el ascenso que quería, estoy destinado al fracaso”. En su lugar, cambie ese pensamiento a «Aunque no logré el ascenso puede ser exitoso en lo que hago y me esforzaré por alcanzar mi meta».

8. Pase menos tiempo con personas negativas

Por último, pero no menos importante, asegúrese de rodearse de personas que tienden a pensar de manera positiva. Todo el mundo tiene al menos un amigo o familiar que se queja de cualquier cosa.

Desafortunadamente, la negatividad puede ser contagiosa y las quejas crónicas de esa persona tóxica y negativa pueden contagiarle. No tiene que cortar por completo a estos quejosos crónicos. Solo asegúrese de tener un grupo saludable de personas que contrarresten la energía negativa que podría enfrentar de vez en cuando.

ALFA