Muchas personas hemos oído hablar de los signos del zodíaco astronómico, que se asocian con animales que representan a las constelaciones, conocidas por las culturas mesopotámica y babilónica desde el año 2000 antes de Cristo, cuando se dieron cuenta que a lo largo de cada año, estas constelaciones eran atravesadas por el sol.
Así que, de acuerdo con el zodíaco astronómico existen 14 signos en lugar de los 12 de la rueda zodiacal astrológica que conocemos, lo cual es ignorado por los astrólogos modernos, aunque este modelo de la astronomía era conocido por los antiguos astrólogos griegos.
Esto se debió a que los dos signos adicionales, fueron excluidos porque comparten muy poco tiempo con la órbita terrestre, y además su inclusión complicaba la distribución de todos los signos y sus elementos, desequilibrando la simetría matemática del número 12; que hace más complejo el manejo de la información astrológica.
Por estas razones, pocas personas conocen la existencia de las 14 constelaciones. Sin embargo, en el año 2011 la Unión Astronómica Internacional precisó la posición de un decimotercero signo llamado “Ofiuco”, que se venía discutiendo desde 1930. Este signo que ocupa la posición 13 dentro de los signos del zodíaco astronómico, y está entre Escorpio y Sagitario, en la mitología griega se asocia con Asclepio, hijo de Apolo, quien era un médico con dones para la sanación de las personas, e inclusive se dice que tenía el poder de revivir a los muertos.
La leyenda sobre Ofiuco cuenta que Hades envidiaba los dones de Asclepio, y creía que era una amenaza para el inframundo, motivo por el cual ordenó a Zeus que lo matara, quien obedeció, colocándolo al lado de una serpiente en el cielo, pasando a ser el símbolo de la vida renovada. Por eso, se conoce a este signo como “El cazador de serpientes” o “Serpentario”.
El período que comprende uno de los nuevos signos del zodíaco astronómico, va desde el 29 de noviembre hasta el 15 de diciembre, observándose que el sol está más tiempo en Ofiuco que en el signo de Escorpio; posicionándose entre Escorpio y Sagitario; y compartiendo características de estos dos signos con las suyas propias.
Pero, a pesar de que Ofiuco es el decimotercer signo, ocupa la posición nueve dentro de los signos del zodíaco astronómico, siendo la Vara de Esculapio su elemento de origen y como se dijo anteriormente, simboliza la serpiente. Por otra parte, el sol pasa por Ofiuco durante 17 días cada año, desde el 29 de noviembre hasta el 15 de diciembre; por lo que ocupa casi todo el signo de Sagitario, reemplazando su posición, lo que hace que se corra junto a los demás signos.
El segundo de los nuevos signos del zodíaco astronómico es Cetus, que se mantuvo oculto durante los últimos cuatro mil años, ubicándose entre los signos de Aries y Piscis, y se encuentra representado por un gran monstruo marino, que, de acuerdo con la mitología griega, lo asesinó Perseo; cuando la princesa Andrómeda, se dirigía a servirle su almuerzo.
Cetus es teóricamente el decimocuarto de los signos del zodíaco astronómico, pero en la práctica es difícil que se considere como tal, debido a que permanece en la línea zodiacal durante muy poco tiempo. Específicamente un día, ya que su estadía comienza el 27 de marzo y culmina el 28 de marzo. La constelación del hemisferio sur de Cetus, representada por la ballena o el monstruo marino, está en una región conocida como Agua, próxima a tres constelaciones parecidas, Piscis asociada a los peces, Aquarius, que representa al copero y Eridanus, relacionada con el río.
Debido a que, desde la antigüedad, el número 13 era considerado como de mal augurio y el período de Cetus es muy corto, durante el renacimiento se decidió dividir el espacio en 12 constelaciones, en lugar de 14, dejando a estos dos signos fuera de los signos del zodíaco astronómico. Por lo tanto, se asignaron 30 grados a cada constelación, que dan en total los 360 grados, en los cuales el sol hace su recorrido por la rueda zodiacal, durante un año.
Pero, los signos del zodíaco astronómico, incluyendo a Ofiuco y Cetus, hacen que las constelaciones se distribuyan en la eclíptica del espacio, de la siguiente forma: Los primeros siete signos serían: Aries: 18 de abril al 13 de mayo, 24,5 grados; Tauro: 13 de Mayo al 20 de Junio, 36,5 grados; Géminis: 20 de Junio al 19 de Julio, 28,5 grados; Cáncer: 19 de julio al 9 de agosto, 20 grados; Leo: 9 de agosto al 15 de septiembre, 35,3 grados; Virgo: 15 de septiembre al 30 de octubre, 44 grados; Libra: 30 de octubre a 22 de noviembre, 23 grados.
Le siguen en orden; Escorpio: 22 de noviembre a 29 de noviembre, 7 grados; Ofiuco: 29 de noviembre al 15 de diciembre, 18 grados; Sagitario: 15 de diciembre al 19 de enero, 33,5 grados; Capricornio: 19 de enero al 16 de febrero, 29,5 grados; Acuario: 16 de febrero al 11 de marzo, 22,5 grados; Piscis: 11 de marzo al 27 de marzo 37,5 grados; y finalmente Cetus: 27 de marzo (2 pm) al 28 de marzo (2 am)
Como puede darse cuenta, los signos del zodiaco astronómico comienzan el 18 de abril con Aries y terminan el 28 de marzo con Cetus, entonces se preguntarán que pasa con los días desde el 28 de marzo hasta el 18 de abril. Sencillamente, esos 22 días y 22 grados que faltan para completar los 360 grados, quedan sin las influencias zodiacales, lo que es una razón suficiente para que los astrólogos modernos no acepten este modelo de los 14 signos del zodíaco astronómico.
ALFA